A pesar de los miles de fallecidos y contagiados que está provocando la pandemia del COVID-19 en Cataluña, los principales líderes políticos independentistas parecen estar ya preocupados por otras cuestiones como la cita del 11 de septiembre, jornada en la que el separatismo saca a la calle a sus bases para reivindicar la autodeterminación de Cataluña y la ruptura con España. En años anteriores y por estas fechas era habitual observar cómo políticos y periodistas de la órbita independentista comenzaban a calentar motores de cara a esa convocatoria. Este 2020, y a pesar del coronavirus, no va a ser menos. Y el primero en lanzar la idea ha sido el ex presidente Carles Puigdemont, fugado de la Justicia española y actualmente eurodiputado.
En una entrevista en RAC1, Puigdemont ha asegurado que no renuncia a movilizar al independentismo en el 11S a pesar de la incertidumbre sobre cómo se gestionará entonces la cuestión del coronavirus. El ex presidente ha dado por hecho que, de mantenerse las normas de distancia social, deberán ser respetadas. Sin embargo, también se ha mostrado partidario de utilizar las mismas para lograr "una coreografía" que proporcione imágenes que puedan "dar la vuelta al mundo". Y es que no se puede obviar que, desde 2012 y de la mano de la ANC y de Òmnium Cultural, a la cita del 11S asisten centenares de miles de independentistas que, si quieren repetir este año, tendrán que hacerlo previsiblemente en unas condiciones que nada tienen que ver con las de convocatorias anteriores. A la distancia de seguridad, de entre 1,5 y 2 metros entre personas, se pueden sumar las medidas de autoprotección como las mascarillas y los guantes.
Nunca más
La postura de Puigdemont choca frontalmente con la que mantiene la Generalitat gobernada por Quim Torra. Y es que el Govern tiene una visión de lo que sucederá en los próximos meses que parece más ajustada a la realidad que la que ofrece el ex presidente. Tanto es así que hasta la consejera de Salud, la republicana Alba Vergès, ha llegado a afirmar esta semana que los ciudadanos se tienen que "meter en la cabeza que no volveremos a la normalidad nunca más".
"Será una nueva normalidad", ha añadido Vergès en una entrevista en la misma cadena radiofónica recogida por El Triangle, "que quizás se asemejará a lo que hemos vivido hasta ahora, pero hay cosas que cambiarán". La consejera, en un tono alarmista, ha explicado que "pasarán muchos meses y la nueva normalidad hará que vivamos de una nueva manera los próximos inviernos pero nos tenemos que poner en la cabeza que esto durará meses". La consejera, sin embargo, también ha augurado que la pandemia se podrá superar: "No se acabará el mundo. Saldremos".