El candidato de CiU a las generales, Josep Antoni Duran Lleida, ha asegurado hoy que el presidente del PP, Mariano Rajoy, "es un mandado del señor (José María) Aznar", y ha reprochado al PP que "siga usando el terrorismo" para la "confrontación política" con el PSOE.
En un acto con representantes empresariales, Duran ha hecho este comentario sobre Rajoy al ser preguntado por el emplazamiento que ayer hizo el expresidente del Gobierno al líder del PP para que inicie una "revolución de la normalidad" y aplique medidas de austeridad en España.
Respecto a la tesis de Aznar de que el PSOE y el Gobierno han tratado a los terroristas como hombres de paz, ha asegurado que por supuesto le preocupa que ETA deje de matar, pero que la mayor preocupación que tiene ahora España es reducir el paro.
Asimismo, Duran ha deplorado que el PP siga usando este asunto en la batalla política, algo que nunca hizo CiU, ha subrayado, y respecto al caso de Bildu, ha instado a Aznar a confiar "en el Poder Judicial".
El salario de los funcionarios, cosa del Gobierno
Del mismo modo ha evitado pronunciarse sobre si hay que rebajar o no los sueldos de los funcionarios que dependen de la Generalitat, y respecto a los del Estado, ha asegurado que la decisión corresponderá al nuevo Gobierno.
Duran ha comentado, en alusión a los funcionarios del Estado, que hay que tratar de tocar "lo menos posible" los salarios, pero que el Gobierno que se constituya después de los comicios del 20N deberá tomar una decisión una vez que conozca "cómo deja el PSOE el conjunto del Estado".
De entrada, ha dicho Duran, hay un "agujero" de unos 20.000 millones de euros en el Ministerio de Defensa provocado por la compra de armamento, y ha añadido: "No sé cuántos agujeros habrá como los de la señora (Carme) Chacón", en alusión a la ministra.
Preguntado por Cataluña, ha asegurado que el Govern en "ningún momento" anunció una reducción de salarios a los funcionarios, aunque ha evitado dar su opinión sobre si habría que hacerlo y ha hecho suyas las palabras del portavoz del gobierno catalán, Francesc Homs