La alpinista asturiana Rosa Fernández ha llegado este viernes, día 7, a Katmandú feliz y contenta tras haber conseguido su sexto 'ochomil' en el Manaslu, y se recupera del esfuerzo y de las congelaciones que sufrió en los de los pies.
Rosa Fernández logró hollar el Manaslu en compañía exclusivamente de su sherpa Dorchi, tras unas semanas de vientos monzónicos y grandes nevadas.
La ciclista y montañera de Cangas consiguió vencer una montaña que dos ocasiones se le había negado y lo hizo horas antes de que también lo consiguiera el vitoriano Juanito Oiarzabal.
Rosa Fernández aseguró que la congelación de sus dedos no le obligará a ser hospitalizada y confirmó que las molestias estomacales que padeció en la escalada, que pudieron ser motivadas por los medicamentos que toma en su tratamiento contra el cáncer de pecho, empezaban a desaparecer.
En todo momento, la montañera asturiana se mostró muy satisfecha, consciente de que está capacitada para emprender empresas mayores el año próximo.
Si todo transcurre con normalidad, Rosa Fernández regresara el martes a Madrid, donde será recibida por todos los periodistas asturianos que trabajan en la capital de España, y podrá degustar su primera fabada tras el Manaslu. Luego viajará a Asturias y comenzará a planificar su nuevo proyecto, que podría realizar en el mes de abril si consigue el apoyo necesario.