Estas manifestaciones del sector financiero español llegan después de la reunión que mantuvieron el pasado fin de semana la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en la que acordaron medidas desconocidas para fortalecer el sistema bancario europeo. Respecto a esta situación, este portavoz comentó que "no es aceptable mantener más tiempo" la incertidumbre existente y agregó que "la deuda soberana ha sido siempre considerada un activo sin riesgo para el sistema financiero".
Sobre este asunto, las dudas surgidas respecto a la solvencia de los estados europeos, fomentada por las agencias de calificación de riesgo estadounidense, lamentó "la falta de transparencia con la que se está llevando a cabo el debate sobre las crisis de la deudas soberanas y cómo está afectando a los bancos europeos". Además, solicitó que las autoridades europeas aclaren con urgencia "qué solución van a dar a la crisis griega y qué va a ocurrir con la capitalización de los bancos", dado que existen divergencias sobre lo que se decide y se habla.
Fuentes gubernamentales citadas por ‘El País’ consideran que incrementar hasta el 7% la exigencia de capital básico como plantea la Autoridad Bancaria Europea obligaría al sector a aumentar su capital inmovilizado, dificultando aún más la concesión de créditos.