La preparación de esa reunión de jefes de Estado y Gobierno del G20 es el objetivo de la reunión de París, según las escasas explicaciones aportadas por la presidencia francesa de turno de este grupo de países, que reúne a las principales economías industrializadas y a las de los países emergentes.
Al encuentro ministerial le precede la visita a París del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, que se entrevistará con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, para preparar la cumbre del G20 de Cannes y el decisivo Consejo Europeo de la semana próxima.
En declaraciones a la emisora de radio "Europe 1", el ministro francés de Finanzas François Baroin, subrayó hoy que hay que acabar con la situación actual porque "es una locura que en la cabeza de los mercados esté el riesgo soberano, el riesgo de que un Estado quiebre (...) por una cuestión de confianza".
Y señaló que para arreglar esta situación y para dar estabilidad hace falta "un plan global y duradero", lo que incluye el fondo europeo de salvamento, la recapitalización de la banca, una solución a la deuda griega y la reforma de la gobernanza de la zona euro.
Baroin adelantó además que mañana propondrá a los otros ministros del G20 la adopción de "un conjunto de principios comunes" para la protección del consumidor en relación con los productos financieros basados en cuatro ejes.
El primero es que en la comercialización de esos productos hay que "pasar de una lógica de venta a una lógica de las necesidades del cliente", de forma que las entidades financieras habrán de tener en cuenta en particular las capacidades de las personas a los que se los venden.
Las ofertas -añadió Baroin en una reunión celebrada en la sede de la OCDE en París- tendrán que ser más claras, con una información comprensible para el cliente, y se habrá de tener en cuenta "la asimetría de informaciones" entre los vendedores y el consumidor para "evitar abusos" pero también "conflictos de intereses".
El ministro dijo que será imperativo aplicar las reglas de la competencia y así por ejemplo los productos se presentarán de forma que se puedan comparar con los de otras entidades.
Baroin, que preside la reunión del G20 de hoy y mañana, incidió en que "las condiciones de comercialización de los productos financieros son un reto para la confianza", que a su vez es "la base" para restablecer el crecimiento económico.
Y recordó que las condiciones de comercialización de los créditos "subprime" en Estados Unidos estuvieron en el origen de la crisis financiera actual por ser "abusivas" e "inadecuadas" para los consumidores.
El ministro francés denunció el "cinismo" y las "mentiras" que rodearon tanto la concepción de esos créditos hipotecarios como su venta.
El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Ángel Gurría, constató en la misma reunión en la que participó Baroin que desde el inicio de la crisis se han hecho "progresos significativos" en la protección de los consumidores en la actividad financiera.
Pero "los bancos siguen estando en el centro del problema" y por eso consideró Gurría justificados los trabajos llevados a cabo a instancias del G20.