Por momentos visiblemente emocionado, Al Zawahiri explica que grabó esa cinta a petición de sus seguidores, que le solicitaron que evocase el lado humano del hombre que ordenó los atentados del 11-S de 2001, y que murió el pasado 2 de mayo en una operación de EEUU contra su escondite en la ciudad pakistaní de Abbottabad.
"Esa es la parte noble y excelente que tuvimos el gusto de conocer yo y todos los que acompañaron a esta persona de alta ética y generosidad", dice Al Zawahiri en una grabación cuya autenticidad no ha podido ser verificada.
"Quizás la gente mira al león del islam (en alusión a Bin Laden) amenazando a EEUU y no llega a tener la verdadera imagen de una persona amable y virtuosa, con sentimientos tiernos y de gran timidez y ética noble", agrega.
En su hagiografía, Al Zawahiri, por cuya captura EEUU ofrece 25 millones de dólares, rememora que lo primero que descubrió de Bin Laden fue la lealtad hacia sus compañeros: "Siempre hablaba bien de ellos y recordaba los favores que le hicieron".
A lo largo de 30 minutos de grabación, Al Zawahiri repasa anécdotas e instantes de la vida del difunto dirigente de Al Qaeda.
Recuerda cómo, por ejemplo, le hablaba a Bin Laden de su hijo Mohamed, muerto en 2001 en un ataque de la OTAN durante la guerra de Afganistán, y que este se ponía a llorar pese a que el propio Al Zawahiri ya lo había "superado".
Al Zawahiri, médico de formación, nació en Egipto en 1951, se unió al grupo terrorista egipcio "Yihad" (Guerra Santa) y es considerado actualmente el número uno de la organización Al Qaeda tras la muerte de Bin Laden el pasado 2 de mayo.
Días después, el Gobierno de Estados Unidos difundió cinco vídeos caseros de Bin Laden en los que este aparecía ensayando discursos propagandísticos con diferentes atuendos y revisándolos en la televisión con un mando a distancia en la mano.
Las imágenes, que también muestran escenas de la vida cotidiana de Bin Laden en su escondite, fueron reproducidas sin audio, ya que las autoridades estadounidenses consideraban su emisión "inapropiada".
EL VIDEO, SU MEDIO HABITUAL
Los comunicados audiovisuales también han sido un recurso habitual de Al Zawahiri, quien tras el citado ataque que mató a dos de sus hijos, tres de sus hermanos y a su esposa en noviembre de 2001, decidió desaparecer durante más de un año y reapareció en 2003.
En otro momento del vídeo difundido ahora, el egipcio cuenta cómo reaccionó Bin Laden cuando se enteró de que una mujer había levantado una pancarta pidiéndole que "cumpliera su promesa" y apoyara a los palestinos durante una protesta en Gaza.
Entonces, Bin Laden se quedó en silencio y se alejó a un rincón de la mezquita en la que estaba y se puso a llorar mientras rezaba, según Al Zawahiri. Además, el terrorista revela que una vez Bin Laden trajo a un jeque mauritano a Afganistán para enseñar religión y lengua árabe a sus hijos.
Como el imán era "competente", Al Zawahiri se apuntó con los hijos de Bin Laden a esas lecciones sobre métodos de lectura del Corán con ese profesor, que siempre insistía en regalarle fruta y pescado.
En el vídeo de loa a Bin Laden, el líder de Al Qaeda aparece con gafas y una larga barba canosa, vestido con una túnica y un turbante blancos, sentado delante de un fondo verde.
Aunque la grabación ha salido a la luz en las últimas horas, parece realizada hace meses, porque en ella Al Zawahiri también hace mención al ejecutado líder libio, Muamar el Gadafi, como si este estuviera aun vivo.
