El candidato a la secretaría general del PSOE Alfredo Pérez Rubalcaba ha asegurado este jueves que, ante el proceso interno para liderar el partido, él no tiene rivales ni adversarios en el seno del mismo, sólo compañeros, y ha prometido un proyecto fundamentado en el cambio y la unidad.
Rubalcaba se ha expresado así en su intervención en el acto que ha protagonizado en la sede de UGT de Madrid en el que ha lanzado su candidatura para relevar a José Luis Rodríguez Zapatero al frente del PSOE en el Congreso federal de Sevilla.
En un salón abarrotado y en presencia de dirigentes socialistas que no se han decantado por él como candidato (como Tomás Gómez, José María Barreda o Roberto Jiménez) ha agradecido la presencia de todos los que han acudido al acto incluidos los que ha dicho que es consciente de que no le van a apoyar.
"Sé distinguir entre adversarios y compañeros, y en el PSOE no tengo adversarios", ha subrayado sin citar en ningún momento a la exministra Carme Chacón y antes de asegurar que quien no practique la tolerancia y el respeto no estará en su candidatura.
Rubalcaba ha explicado que se ha decidido a dar el paso porque cree que puede ser útil para el PSOE y para el país, y porque puede ofrecer soluciones nuevas para problemas nuevos.
El proyecto con el que quiere pedir la confianza de sus compañeros de partido ha dicho que va a estar fundamentado en el cambio y la unidad.
A su juicio, si los socialistas no son capaces de conseguir la unidad, no podrán sacar adelante los cambios profundos que necesita el partido.
Rubalcaba ha asegurado que si sale elegido secretario general del PSOE pondrá en marcha un gran debate abierto a toda la sociedad que culmine en "una conferencia política en primavera de 2013 para alumbrar un gran proyecto político". Ha explicado que ese debate debe hacerse de manera conjunta con los partidos socialistas europeos y sobre la base del programa electoral con el que el PSOE se presentó a las elecciones el pasado 20N.
Rubalcaba ha defendido que en ese programa el PSOE ya demostraba haber "aprendido de los errores" y ha remarcado que debe ser además la base de una oposición "útil".