La agencia Moody's ha asegurado hoy que para que España reduzca su déficit fiscal hasta el 4,4% del PIB en 2012 debe hacer un ajuste de 40.000 millones de euros, de los que le quedan aún casi 25.000 millones después de las medidas anunciadas ya por el Gobierno.
En un informe publicado hoy, la agencia recuerda que las iniciativas anunciadas hasta el momento suponen un ajuste próximo a los 15.300 millones, principalmente por el recorte de 8.900 millones en gastos al congelar los sueldos de los funcionarios y el aumento de 6.300 millones de los ingresos, principalmente por el impuesto sobre la renta.
En cuanto a las iniciativas del Ejecutivo para reforzar la lucha contra el fraude fiscal, con la que se recaudarían 8.000 millones más, Moody's advierte de que estos ingresos son "muy difíciles de estimar y recuperar". Por lo tanto, la agencia deja entender que al Gobierno no le queda otra salida que aplicar nuevos recortes para conseguir un ajuste de casi 25.000 millones en un año en el que cree que la economía española caerá entre un 0,5 y un 1%.
Moody's hace estas previsiones después de que el Gobierno haya anunciado que el déficit público en 2011 rondará el 8 % del PIB, casi 22.000 millones más de lo previsto.
Esto, a juicio de la agencia, supone un "desafío" para el nuevo Gobierno, que ya ha reconocido un ligero déficit en las cuentas de la Seguridad Social frente al superávit del 0,4 % del PIB previsto. A ese agujero habrá que sumar el desajuste presupuestario del Estado central superior al 4,8% del PIB, así como el de las comunidades autónomas y el de los ayuntamientos.
Elogio a la velocidad y el compromiso del Gobierno
La agencia elogia que la rapidez del Gobierno refleja su compromiso con la consolidación fiscal, pero incide en que es "necesario" adoptar más medidas para que las finanzas públicas de España vuelvan "a una senda sostenible".
A juicio de Moody's la financiación de las autonomías necesita una reforma "con urgencia", por lo que valora que el Gobierno central quiera ejercer un mayor control y autorizar previamente los presupuestos de las comunidades autónomas.
Asimismo aplaude los recortes de varias autonomías porque hace hincapié en que reconducir el déficit del conjunto de las administraciones hasta el 4,4% requiere un "esfuerzo sin precedentes".
Y lograr un ajuste fiscal masivo en medio de la desaceleración del crecimiento económico agrava los riesgos de las perspectivas económicas negativas, por lo que ahora piensa que la economía española puede llegar a caer hasta un 1%.