El candidato a liderar el PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha replicado hoy a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que sea su partido el que rehabilite a Francisco Camps y le vuelva a poner de presidente de la Comunidad valenciana si realmente cree que es un ciudadano ejemplar. Después de que De Cospedal se preguntara anoche quién repone ahora la honorabilidad de Camps, una vez que el jurado le ha declarado no culpable por el llamado caso de los trajes, Rubalcaba ha sido tajante al responder: "Vosotros".
“Si creéis que es ciudadano ejemplar, que se pagó los trajes, le podéis rehabilitar y hacerle presidente de la Comunidad valenciana", ha sugerido Rubalcaba, para después recordar, no obstante, que Camps dejó esa autonomía "en la ruina".
Rubalcaba se ha expresado en estos términos durante una reunión con medio centenar de dirigentes socialistas para hablar de su candidatura, entre ellos el ex ministro Ramón Jáuregui, quien ha señalado a los medios que, a parte del veredicto del jurado, existe "una verdad social que está ya muy extendida y que dice a las claras qué es lo que la gente piensa y cree de este asunto".
Jáuregui ha dicho que el veredicto es "respetable" porque hay que ser respetuosos con las resoluciones judiciales, pero ha dejado claro que el proceso no ha terminado y que incluso hay casos en los que el Tribunal Supremo ha revocado sentencias de jurados populares.
El diputado del PSPV-PSOE en las Cortes Valencianas Ángel Luna, uno de los cuatro
parlamentarios socialistas que ha ejercido la acción popular en este caso, ha asegurado, por su parte, que el fallo del jurado es "extraordinariamente parcial y pintoresco".
Luna, quien se ha proclamado "muy descontento" con el veredicto, ha mostrado su disposición a recurrirlo si supiera que hay alguna posibilidad de que prosperase el recurso, si bien ha recordado que todavía queda "lo grueso" de la trama Gürtel, que "va a poner en la picota a muchos altos dirigentes del PP en la Comunidad valenciana".
A su juicio, fue un error escindir "lo que la realidad había unido" y separar el caso de los trajes del resto del procedimiento, porque se trataba todo de la misma trama que regalaba y contrataba. Pero el Tribunal Supremo "se empeñó en escindir la realidad" y ha dado lugar "a un procedimiento extraño con un jurado y una sentencia todavía más extraña", ha apreciado.