No hay mejor lugar para reinventarse que el anonimato de una comunidad como la de los expatriados por su trabajo, según la premisa que utiliza Chris Pavone en su primera novela, Los expatriados, a la que su autor define como "un 'thriller' para los que no suelen leer este género".

El autor norteamericano ha construido en su novela una trama de espionaje y delitos para dejar patente que todo el mundo miente por "la incapacidad para reconsiderar las malas decisiones o admitir algo de lo que te avergüenzas", ha explicado en una entrevista con Efe.

Una reflexión que desarrolla a través del matrimonio MacLean, Kate y Dexter, que se traslada desde Washington a Luxemburgo, cuando a él le ofrecen trabajo como asistente de seguridad de uno de sus bancos.

Un cambio que Kate pretende aprovechar para deja atrás su sucio pasado como espía y que es desconocido para su familia. Aunque la llegada al ducado de otra pareja estadounidense pondrá en jaque su tapadera.

Los expatriados (Suma) ha sido alabada por nombres como John Grisham y comparada con las obras de Robert Ludlum, ante lo cual Pavone se siente honrado, aunque reconoce que apenas lee novelas de espionaje.

"Para mí es más importante el lenguaje, las ideas, las voces, la ricas descripciones y las metáforas que te hacen abrir los ojos, el argumento es lo de menos", explica el escritor.

Por esta razón, Pavone dice estar sorprendido de haber escrito un libro de espías, aunque reconoce haber utilizado muchos elementos populares del género como la localización.

"La novela se tenía que desarrollar en Europa, donde radica el sentido del espionaje para los estadounidenses. Para un europeo, una persona con gabardina en una calle empedrada es alguien que intenta no mojarse; para nosotros es un espía", argumenta.

Pavone empleó durante el proceso de creación de "Los expatriados" su experiencia como editor, por lo que redactaba "como si tuviera que venderlo en cualquier momento, manteniendo la vista puesta en la parte más irresistible de la historia".

Aunque también ha recogido su experiencia personal a través de Kate. "Dejé mi carrera, mi identidad, toda mi vida para seguir a mi mujer a Luxemburgo. Tenía que reinventarme y eso inspiró el libro", explica.

Tras el éxito de ventas logrado en Estados Unidos por Los expatriados, que será llevada al cine, Pavone trabaja ya en otra novela de intriga, "pero no de espías", y no descarta retomar las vidas de los MacLean más adelante.