Ayer fue un día que los trabajadores de Público no olvidarán nunca: tuvieron que recoger sus cosas y marcharse con la música a otra parte después de que la semana pasada les comunicaran el cierre definitivo. El temor al futuro se mezclaba con la nostalgia del pasado y el cariño por un proyecto y un equipo en el que tantas horas han echado todos nuestros compañeros.

Pero también hubo gran indignación por el mail enviado por el director a toda la plantilla. Mientras el personal no sabe cuándo ni cómo van a cobrar los atrasos, ni cómo van a apuntarse al ERE, ni sus condiciones, ni si va a haber posibilidad de quedarse en algún tipo de versión híper reducida, todos recibieron un simple correo interno que decía: “Un orgullo haber formado parte de 'Público'. Gracias sinceras y disculpas por los malos momentos. Salud y toda la suerte para un futuro mejor. Abrazo, Jesús Maraña”.

Así nos lo han hecho llegar con un monumantal cabreo varios compañeros de ese medio y así lo reproducimos. Desde lo que queda de esa redacción nos cuentan que al antiguo director (y a algún que otro alto cargo) le llaman “el Capitán Schettino”, porque ayer, directamente, ni se presentó por ahí. “Ha sido el primero en abandonar el barco”, decían unos periodistas que todavía no saben si a primeros de este mes podrán cobrar la nómina de febrero junto a los atrasos de diciembre y enero.

Los periodistas recordaban con amargura cómo ahí no ha dado explicaciones nadie. “Cuando le pedimos al director que explicara algo a la redacción sobre cómo estaban las cosas, nos dijo que el administrador concursal se lo había desaconsejado”. De traca.