"El que ha ganado las elecciones no se va". Cierre de filas en torno a Javier Arenas en el seno del aparato del PP andaluz. Su secretario general, Antonio Sanz, lo ha dejado claro este lunes durante una comparecencia ante los periodistas.
El número dos del PP-A ha querido zanjar cualquier especulación sobre el futuro más inmediato del líder del centro-derecha andaluz, al anunciar que "el señor Arenas seguirá en el Parlamento de Andalucía". A Sanz dicho escenario le parece "lo más lógico". Desde la dirección regional se muestran "muy orgullosos" de la contribución que su presidente "sigue y seguirá teniendo" desde la Cámara autonómica.
Sanz no se muestra tan claro sobre si Arenas continuará al frente de la nave conservadora como presidente. Tan sólo se ha referido expresamente a la continuidad de su jefe de filas como parlamentario, no como cargo orgánico. Un matiz sumamente importante.
Arenas no ofreció dimitir
Poco después Sanz ha sido preguntado por el próximo Congreso regional que el PP de Andalucía aún debe celebrar y cuyo proceso de plazos "se abre ahora porque tocaba", ha dicho el secretario general sin concretar fecha. De ese cónclave podría salir el sustituto del artífice de la amarga victoria de anoche, la cuarta derrota en sus aspiraciones a presidir la Junta de Andalucía.
Desde la dirección regional dicen estar "muy orgullosos" de la contribución de su presidente
También ha tenido que desmentir que Arenas pusiera anoche su cargo a disposición del presidente del partido a nivel nacional, Mariano Rajoy, durante las dos conversaciones telefónicas que ambos mantuvieron: "No, nunca porque yo fuí testigo", ha zanjado Sanz
Todas las referencias a la continuidad, o no, del que fuera vicepresidente segundo con José María Aznar se han producido de forma forzada, tras la insistencia de los periodistas. De hecho, Sanz ha centrado el grueso de su intervención en destacar el "resultado histórico" del PP en Andalucía, al ser la primera fuerza política de la región.
Griñán, presidente sin ganar
En el lado opuesto, Sanz critica que el candidato del PSOE, José Antonio Griñán, "siga siendo presidente de la Junta de Andalucía sin haber ganado unas elecciones". Heredó el poder de Manuel Chaves y ahora seguirá en él gracias a un pacto con Izquierda Unida.
Desde el aparato del PP-A achacan haber quedado tan sólo 40.000 votos por encima del PSOE- con respecto a los 400.000 de las elecciones generales- a "la bajada considerable de la participación". De la desmovilización de sus votantes no dicen nada.
Los conservadores andaluces critican los precedentes de gobiernos de coalición municipal entre PSOE-IU y ponen como ejemplos los que tuvieron lugar en Sevilla, Córdoba y Jaén. "No parece lo más positivo que la fórmula elegida sea insistir en la receta fracasada que nos ha llevado a 1,2 millones de parados".
Sobre si han hecho autocrítica, Sanz ha vuelto a repetir algo muy reiterado por el propio Arenas durante su campaña: "nos bañamos en humildad cada día". Sabe a poco a la hora de reconocer errores cometidos. Será mañana martes cuando se reúna la Ejecutiva regional del PP-A tras analizar resultados en cada municipio. De momento la vida sigue igual, como decía la canción.