El anuncio sorprendió en el seno de la Guardia Civil. Por la falta de publicidad previa y por el ámbito de las competencias al que hace referencia. La Dirección General de la Marina Mercante, dependiente del Ministerio de Transportes de José Luis Ábalos, instruirá a los Mossos d’Esquadra y a los bomberos catalanes en labores de navegación y rescate marítimo. El acuerdo bilateral, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), provoca indignación en estamentos del Instituto Armado, que temen una cesión de las competencias que ahora recaen sobre sus hombros.
De acuerdo a la información publicada en el BOE, el director general de la Marina Mercante, Benito Núñez, y la directora del Instituto de Seguridad Pública de Cataluña, Montserrat Royes, firmaron un convenio el pasado 31 de mayo para la “formación marítima que deben recibir los integrantes del Cuerpo de Mossos d’Esquadra y del Cuerpo de Bomberos” de Cataluña. Una función que hasta ahora desempeñaban los agentes de la Guardia Civil.
En concreto, el convenio establece un curso formativo con 32 horas de teoría, distribuida en materias como administración marítima, normativa, despacho y documentación de buques, ley de costas, comunicaciones marítimas y lucha contra la contaminación marina, entre otros. También habrá una formación práctica de 30 horas.
El Gobierno clasifica las destrezas que adquirirán mossos y bomberos en tres ámbitos. Con la embarcación atracada se les instruirá en preparativos antes de iniciar la maniobra, para salir a la mar, manejo de cabos y cuestiones de seguridad. En segundo lugar, las maniobras en dársena, además de la aplicación de las reglas de rumbo y gobierno, velocidad de seguridad, vigilancia de balizas. En tercero, maniobras de rescate y navegación en mar abierto.
Las pretensiones de los Mossos
La polémica sobre las competencias en las aguas que bañan las costas de Cataluña no es nueva. En febrero de 2020, el entonces conseller de Interior Miquel Buch presentó la primera embarcación de los Mossos d’Esquadra para su despliegue en aguas marítimas. Aseveró que el cuerpo autonómico asumiría las funciones de ámbito marítimo que “por ley” corresponden a la Generalitat.
Polémica por las competencias
La directora de la Guardia Civil, María Gámez, afirmó entonces que el despliegue acuático de los Mossos “es para policía administrativa y en aguas interiores”. También que “las competencias de las Guardia Civil en todo caso las va a seguir manteniendo y las tiene en el mar territorial”. El nuevo anuncio publicado en el BOE, no obstante, pone en entredicho esta valoración. Las maniobras y ejercicios descritos hacen referencia directa a movimientos en mar abierto.
Un acuerdo que despierta inquietudes en el Instituto Armado, tal y como manifiestan asociaciones representativas: “Avanza el plan para crear una nueva unidad marítima catalana que nos arrebate competencias”, denuncia la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC). Desde la asociación lamentan que la “formación será pagada por el propio Gobierno, y que, para mayor agravio, será de una calidad muy superior a la que reciben los guardias civiles del Servicio Marítimo”.
También denuncian la inquietud que ha provocado entre los agentes destinados en Cataluña que actualmente cumplen con estas funciones. Por eso exigen explicaciones al Ministerio del Interior y una comparecencia pública de Fernando Grande-Marlaska para aclarar el futuro de esta especialidad en la región.
"La renuncia de competencias de la Guardia Civil a la policía autonómica y a los bomberos seguiría debilitando la influencia del Estado en nuestra comunidad, lo que incrementaría aún más las pretensiones y el sentimiento independentista en Cataluña", reflexiona Agustín Leal, portavoz de las asociación Jucil. " Y añade: “La cesión de las competencias de policía marítima y de los GEAS supondría un ataque directo a la Constitución Española, en concreto al artículo 149.1".