Los 47 acusados de integrar el frente de makos de ETA, entre ellos la abogada Arantza Zulueta, la concejal de Bildu Amaia Izco y el exsenador de ese partido Iñaki Goioga, se han conformado este lunes con penas leves de prisión, evitando ir a la cárcel, a cambio de reconocer su labor para el frente de makos de ETA, si bien los principales acusados estarán un año en libertad vigilada.
Las mayores penas (3 años y medio y 2 años y 7 meses de cárcel, respectivamente) han recaído en Zulueta y el abogado Jon Enperantza, considerados los responsables del órgano KT, coordinador del conocido como frente de makos o de cárceles de la banda terrorista. Los dos se enfrentaban a una petición de la Fiscalía de 14 años de cárcel por participación activa en organización terrorista en grado de dirigente.
No obstante, ninguno de los dos irá a la cárcel al serles descontados los años que estuvieron en prisión preventiva tras ser detenidos en enero de 2014 por estos hechos en la llamada Operación Jaque. El resto -para los que el fiscal pedía desde 8 a 11 años de cárcel- ha pactado con la Fiscalía y las acusaciones populares -AVT y Dignidad y Justicia- ser condenados por participación activa en organización terrorista a penas de dos años o un año y medio de cárcel (la mayoría) al aplicarles a los 47 la atenuante de confesión tardía, con lo que evitan su ingreso en prisión.
En cuanto a las penas de inhabilitación para cargo o empleo público, que en la petición del fiscal oscilaban entre 10 y 15 años, los acusados se han conformado con penas de 3 años, 3 años y medio y en el caso de Zulueta y Enparantza con 5 y 4 años, respectivamente, de inhabilitación absoluta.
Para alcanzar este acuerdo, los 47 acusados han admitido uno a uno los hechos por los que se les acusa ante el tribunal, lo que implica el reconocimiento de su integración o vinculación al "KT/Koordinazioa taldea", un ente organizativo en el que, bajo la dirección de la organización terrorista, se agrupan varias organizaciones que trabajan sectorialmente a favor de los presos y huidos de ETA con el fin de complementar su actividad terrorista.