La ley del aborto de 2010 comienza su deliberación en el Tribunal Constitucional (TC) 13 años después de su aprobación. El Pleno se prepara para abordar las recusaciones planteadas por el PP contra cuatro de sus miembros (incluido el presidente Cándido Conde-Pumpido) y, tras ello, entrará de lleno en el debate de la ponencia. Al respecto, algunos miembros progresistas han planteado sus dudas sobre este texto que, en líneas generales, respalda la ley de José Luis Rodríguez Zapatero.
El Tribunal Constitucional afronta unas sesiones determinantes en aras a dar respuesta a un recurso que lleva más de una década en el cajón. Han tenido que pasar cinco presidentes (María Emilia Casas, Pascual Sala, Francisco Pérez de los Cobos, Juan José González Rivas y Pedro González-Trevijano) y tres ponentes (Elisa Pérez Vera, Andrés Ollero y el actual Enrique Arnaldo) para que el TC por fin debata el recurso sobre la ley de plazos del aborto de 2010.
La trascendencia del tema y la falta de consenso en los años anteriores frenó la respuesta a un asunto al que el nuevo presidente Cándido Conde-Pumpido le ha dado prioridad absoluta. Fuentes del tribunal de garantías consultadas por este medio explican que, tras una primera sesión dedicada a resolver la petición de la magistrada Concepción Espejel de apartarse, este miércoles se retoma el Pleno centrado en estudiar las recusaciones y abordar ya el debate de la ponencia.
Primero las recusaciones
Una minoría del total de 71 diputados del PP que recurrió la ley del aborto pidió que se apartaran de este debate cuatro miembros del TC. Se trata de Conde-Pumpido; el exministro de Justicia Juan Carlos Campo y las magistradas Concepción Espejel e Inmaculada Montalbán. El motivo esgrimido por los recurrentes es que el actual presidente del Tribunal Constitucional votó a favor de la ley en el Consejo Fiscal de 2009 en su condición de fiscal general del Estado.
En relación a Campo explican que debe abstenerse porque ejerció como Secretario de Estado de Justicia del Gobierno que impulsó la ley del aborto y en lo que respecta a Espejel y Montalbán porque se pronunciaron sobre la norma en su condición entonces de vocales del Consejo General del Poder Judicial. Se da la circunstancia de que Espejel se ha querido apartar de esta deliberación pero en la sesión de este martes el Pleno ha impedido que se retire de la votación.
Las fuentes consultadas explican que buena parte de la sesión se ha dedicado a este asunto y que el Pleno ha rechazado la abstención de Espejel al considerar que no hay motivos de peso que la justifiquen. Además, de haber respaldado su solicitud, se abriría la puerta a la recusación de Montalbán y de los otros dos magistrados. Ello amenazaba quedarse sin quórum para debatir el asunto ya que se necesitan al menos 8 de los actuales 11 miembros para poder votar.
Ponencia favorable a la ley del aborto
Cuando resuelvan este escollo, el Pleno entrará de lleno en el estudio de la ponencia que ha trabajado el conservador Enrique Arnaldo. Las fuentes consultadas dan por hecho que este martes arrancan las deliberaciones pero no está tan claro que haya votación. Algunos de sus miembros no descartan protagonizar largas intervenciones en relación a este histórico fallo. Otros, por contra, prevén votación este mismo miércoles.
La ponencia en la que ha trabajado Arnaldo respalda en líneas generales el sistema de plazos de la ley del aborto de Zapatero. En contra de lo alegado por los exdiputados del PP, el texto no considera que sea inconstitucional el precepto de que la madre pueda abortar en las primeras catorce semanas de gestación. La ponencia no es especialmente crítica con los preceptos más genéricos de la norma, especialmente por los años que hace que entró en vigor.
Tanto es así que algunos puntos recurridos entonces no se van ni a estudiar. Es el caso de la supresión de permiso paterno para las menores que quisieran interrumpir su embarazo. El motivo reside en que el Gobierno de Mariano Rajoy lo recuperó en el año 2015 y, por tanto, desaparecido este aspecto se declara pérdida sobrevenida del objeto.
"No es fácil"
No obstante, la ponencia de Arnaldo sí cuestiona algunos preceptos de la ley de plazos del aborto. En concreto pone el foco en la forma en la que reciben información las mujeres que quieren abortar (artículo 17 de la Ley Orgánica 2/2010). La actual ley precisa que la información debe ser "clara, objetiva y comprensible" y que la misma puede ser ofrecida "verbalmente si la mujer lo solicita". La ponencia cuestiona este punto en tanto se tienen que asegurar que la gestante recibe información completa.
Así pues, aunque el borrador de sentencia es principalmente favorable para la ley de Zapatero, no se garantiza que salga adelante puesto que algunos miembros del sector progresista solo plantean dar el aval si la ponencia respalda en su totalidad la norma de hace 13 años. Algunas de las voces consultadas confirman que están en contra de algunos aspectos del borrador y así lo harán saber en las dos próximas sesiones. Con todo, reconocen que es un asunto que "no es fácil" de abordar.
De imponerse el criterio de la actual mayoría progresista Arnaldo podría o bien reformular parte de su planteamiento o bien dejar la ponencia en la que lleva trabajando los últimos años para que la asuma otro miembro del Tribunal Constitucional.
DANIROCIO
tantos años con lo mismo pero que les dan a esta gente que no solucionan nada muchos años para esto, luego dicen que confiemos en la justicia,que por otro lado si que ha sido rapida para indultar a los golpistas y sus amigos,es penoso y de risa
Plunio
«PePe que te voten los que van a morir por tu culpa»
Pueseso
Yo sé de uno: NICOLÁS REDONDO URBIETA, que renunció a su acta de diputado para no votar a favor los cambios a la Ley de la Seguridad Social, al Estatuto de los Trabajadores y a los PGE del gobierno de Felipe González. Por eso fue maldito por su propio partido y apartado de la vida pública. En cuanto a que los políticos del Pepé no son iguales… ¡Anda ya! Pocos que hemos visto venderse por un cargo.
Darksith1977
Más de 10 años recurrida y 5 presidentes del TC (los tres últimos a propuesta del PP). Se les debía caer la cara de vergüenza.