El Ministerio de Agricultura, del que depende jerárquicamente las sociedad estatal Acuamed, ha convocado de urgencia un consejo de administración de la sociedad para poner en marcha una auditoría de todos los contratos adjudicados por la compañía desde 2004.
El consejo se celebrará este lunes, será de carácter extraordinario y en él se aprobará la contratación de los servicios de una empresa especializada que revise todos los contratos y adjudicaciones realizados por Acuamed desde su año de creación, en 2004.
El objetivo es detectar todos aquellos contratos en los que pudieran haber habido amaños y comisiones encubiertas, independientemente de que en paralelo, la Fiscalía Anticorrupción y el juez Eloy Velasco prosigan con sus investigaciones.
"La empresa tenía una juerga montada y lo que hizo este señor [Arcadio Mateo, supuesto jefe de la trama] fue unirse a la fiesta. Esto venía de atrás, era una maquinaria engrasada"
Acuamed, presidida ahora por el actual secretario de Estado de Medio Ambiente en funciones, Pablo Saavedra, creará también un grupo de trabajo, liderado por el subsecretario del Ministerio, Jaime Haddad, para coordinar los trabajos de auditoría para la revisión de todos los contratos, según fuentes cercanas a la empresa estatal consultadas por Vozpópuli.
En el grupo de trabajo también estarán presentes la dirección general del Agua del Ministerio, la Abogacía del Estado, la intervención general y la inspección general de servicio.
Las fuentes consultadas señalan que hay fundadas sospechas de que algunos de los contratos adjudicados en los años anteriores a la trama destapada por Anticorrupción, bajo los mandatos de las ministras de Agricultura Elena Espinosa (2004-2010) y Rosa Aguilar (octubre 2010/ 2011) durante los dos gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero, también se adjudicaron de forma irregular.
"La empresa [Acuamed] tenía una juerga montada y lo que hizo este señor [en referencia a Arcadio Mateo del Puerto, ex director general de la empresa y supuesto jefe de la trama] fue unirse a la fiesta. Esto venía de atrás, era una maquinaria engrasada que adjudicó contratos en los años 2006, 2007 y 2008, por ejemplo, de dudosa legalidad", señalan las fuentes cercanas a Acuamed consultadas.
El subsecretario del Ministerio, Jaime Haddad, dirigirá un grupo de trabajo en Acuamed que revisará todos los contratos adjudicados por la empresa desde su creación, en 2004
Añaden, asimismo, que "algunas de las obras grandes adjudicadas desde 2006 por Acuamed sufrieron modificados y correcciones al alza sobre sus presupuestos iniciales. Por un lado se inflaba el valor de las obras y posteriormente, a mitad del desarrollo de los proyectos, se realizaban los modificados correspondientes para elevar las partidas presupuestarias destinadas a ello".
Acuamed corregía los contratos y contrataba supuestos nuevos servicios, trabajos y materiales que se cobraban, pero que no ser realizaban, afirman estas fuentes. "En la época de Mateo del Puerto, se presionaba a los ingenieros y jefes de obra para que firmasen los certificados de obra y validasen esas correcciones al alza de los presupuestos, aunque estos trabajos no se realizasen. Los que no se sometían a las órdenes del director general y su gente de confianza, eran represaliados, degradados en sus cargos y, en algunos de los casos, despedidos", añaden estas fuentes.
Además de inflar los presupuestos iniciales de los proyectos, a mitad de obra se hacían los modificados y correciones al alza, y se obligaba a los ingenieros a firmar los certificados de obra
Éste fue el caso de Francisco Valiente, ex director de Ingeniería y Obras de Acuamed, que no sólo se negó a participar en la trama corrupta sino que además denunció las irregularidades en 2014.
Sus denuncias fueron tapadas por sus superiores hasta que, por fin, llegaron al consejo de administración del 2 de abril de 2014. De poco sirvió el requerimiento notarial con las denuncias de prácticas corruptas, porque el consejo de Acuamed, con Federico Ramos como presidente, se negó a abrir una investigación. Poco después, Valiente fue fulminantemente destituido de su cargo. Meses después, el ex directivo de Acuamed acudió a la Fiscalía Anticorrupción a denunciar la trama corrupta.