El líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se reafirma en el acuerdo alcanzado con el Gobierno para llevar una posición común a Europa, y no sólo eso, porque tras reunirse con Mariano Rajoy en Moncloa por espacio de dos horas y media, ha avisado que su partido seguirá dispuesto al pacto tanto en el capítulo europeo como en políticas de Defensa. "Le he mostrado mi voluntad de seguir acordando", ha dicho Rubalcaba en un claro mensaje para acallar las críticas públicas y privadas, dentro del PSOE, a este acuerdo. Ha defendido que, tradicionalmente, su formación política, tanto en el Gobierno como en la oposición, ha ofrecido pactos en materia europea "y esa es la posición de la inmensa mayoría del partido".
Tras asegurar que nadie le ha trasladado personalmente ninguna crítica ni cuestionamiento, porque el PSOE "entiende que es nuestra obligación", dice estar seguro de contar "con el apoyo y la confianza de la inmensa mayoría de los socialistas". Interrogado sobre qué se juega su partido con este acercamiento a Moncloa, ha intentado zanjar el asunto con un tajante "quien se juega algo es España". Rubalcaba cree que las cosas están comenzado a cambiar en Europa tras el constatable fracaso de las políticas de austeridad por lo que la reunión del Consejo de Europa de los días 27 y 28 se le antoja trascendental. "Si Rajoy va a Bruselas con un respaldo parlamentario es más fuerte", ha agregado.
Rubalcaba no quiere dedicarse lo que resta de legislatura a pedir la dimisión de Rajoy, por lo que cree que "no hay contradicción" entre cuestionar duramente al Gobiermo por el "caso Bárcenas" y "defender los intereses de España". Ambos dirigentes han coincidido en los tres puntos fundamentales que se dirimen en la cita europea: empleo juvenil, crédito para las pymes y Unión bancaria.
Por otro lado, Rajoy le ha puesto sobre la mesa la reforma de las Administración públicas, que el PSOE evaluará a pesar de la "mala experiencia" que dicen tener con la ruptura de las conversaciones en torno a la reforma de los entes locales. Pero ésta es también, al igual que las relaciones exteriores o la Defensa, una política de Estado. Rubalcaba le ha reclamado al jefe del Ejecutivo que tenga en cuenta para esta reforma a los presidentes autonómicos, incluido el andaluz Griñán y el asturiano Fernández, al objeto de aunar posiciones, para lo que tiene en mente convocar una nueva Conferencia de Presidentes.
En cambio, la reunión se ha saldado con profundas discrepancias en torno a la Ley Wert, mientras se ha pasado de puntillas sobre la reforma de las pensiones, habida cuenta de que no hay ninguna posibilidad de acuerdo al respecto.
Además, el líder de la oposición ha preguntado al presidente del Gobierno en torno a la situación creada con la infanta Cristina y unos supuestos bienes que habái vendido y que nunca fueron suyos. El presidente del Gobierno ha salido ante los periodistas en defensa de la Agencia Tributaria y de la eficacia de sus funcionarios, pero ha admitido que "estamos intentando averiguar qué ha ocrurido exactamente. No voy a echar las culpas a nadie. No lo tengo claro, no lo sé".
