Marinaleda (Sevilla) celebra este fin de semana un encuentro social y político organizado por Adelante Andalucía. En las jornadas se abordarán temas como Palestina, la turistificación, la transición ecológica y, también, los soberanismos con representantes de Cataluña, País Vasco y Galicia.
Con la presencia de Gabriel Rufián, portavoz de ERC en Madrid, Oskar Matute, diputado de Bildu o Noa Presas, diputada del BNG, y Laura Vega de la CUP, Marinaleda tendrá una representación de todos los nacionalismos independentistas del país.
El mapa político a la izquierda del PSOE es un baile que, en los últimos años, ha tenido varios cambios de pareja y de traje. Actualmente, básicamente hay dos bloques: Adelante Andalucía y Por Andalucía.
En Adelante conviven las pulsiones más andalucistas. Con Teresa Rodríguez retirada de la primera línea política tras sucesivos fiascos electorales, la agrupación se asienta en la visibilidad e hiperactividad opositora de sus dos parlamentarios: José Ignacio García y Maribel Mora.
La cita está organizada por la agrupación Adelante Andalucía. La marca es una evolución de la escisión de Podemos en Andalucía de Teresa Rodríguez, que echó el pulso a la agrupación de Pablo Iglesias para tener más autonomía al sur de Despeñaperros.
Teresa Rodríguez fue orillada en el Parlamento y, desde el grupo Mixto de la cámara andaluza se fraguó una agrupación de izquierdas con marcado acento andaluz. Adelante integra a formaciones como Izquierda Andalucista, Primavera Andaluza y Anticapitalistas Andalucía tras la separación con Podemos, Izquierda Unida o Los Verdes.
"Una voz propia" fuera de Madrid
El nuevo camino de Adelante pasaba por buscar "una voz propia" fuera de Madrid para Andalucía. Y a esa voz le gustan los ecos del independentismo vasco y catalán, que tanto consiguen gracias a sus reivindicaciones. De ahí a Marinaleda no hay nada. Adelante Andalucía se siente hoy más cercana a ERC o Bildu que a sus excompañeros de viaje de Por Andalucía.
Pero con este movimiento se está propiciando un distanciamiento entre las dos coaliciones en el espacio político que hay a la izquierda del PSOE. Desde Por Andalucía se distancian de la pulsión independentista que congrega a ERC y Bildu con la otra izquierda federalista.
Fuentes de la coalición que cuenta con 5 parlamentarios y está presente en casi 70 alcaldías de Andalucía admiten que su proyecto es andalucista y federalistas, pero de ahí a confluir con el independentismo hay un trecho. Ningún representante de Por Andalucía estará en la cita de este fin de semana, que actúa casi como convención yanqui. Admiten que no irán a Marinaleda porque nadie les ha invitado.
Mientras se desmarca de Adelante, Por Andalucía lleva meses afianzándose como instrumento parlamentario. Integra a IU, Podemos, Más País, Equo, Alianza Verde, muchas siglas para pocas sillas, se comentó en el inicio de esta coalición.
Sin embargo, al contrario de los que sucede en Madrid, esta coalición de izquierda rueda sin estridencias, por ahora, propiciando alternancias en su mesa de gobierno sin más escándalo. La agrupación cuenta además con un respaldo orgánico poco dado a las salidas de tono, con el andaluz Antonio Maíllo a los mandos de IU.
El calendario aún coloca las elecciones andaluzas muy lejos, en 2026, pero la fracción que provocan las pulsiones independentistas no deben de estas tranquilizado al PSOE que a su izquierda encuentra una creciente brecha. En las últimas europeas, en Andalucía, Sumar y Podemos obtuvieron un ínfimo porcentajes de votos del 5,1 y 2,8 por ciento respectivos.