El presidente de Cataluña, Pere Aragonès, ha dado un discurso previo a la Diada en el que aumenta la presión sobre Pedro Sánchez. En su comparecencia ha catalogado la amnistía como "el punto de partida de la etapa que ahora iniciamos" y exige un referéndum de independencia. "Hasta que el Estado español no dé respuesta a este reivindicación democrática, el conflicto existirá", ha señalado.

"Estamos forzando al Gobierno del Estado a hacer pasos decisivos por la amnistía. A asumirla como imprescindible e inevitable", ha reivindicado. De esta forma, el presidente catalán calienta la calle y señala que una amnistía no sirve "por sí sola" para resolver "el conflicto de soberanía con el Estado". Aragonès ha señalado que "Cataluña quiere votar libremente sobre la independencia" y que "ahora es el momento" de resolver el conflicto catalán.

Aragonès conoce la fuerza que posee el independentismo catalán a la hora de decidir quién presidirá el Gobierno de España durante los próximos cuatro años y no va a dejar pasar "la oportunidad" de conseguir los objetivos secesionistas. El referéndum que exige el presidente no tendría "ningún límite" y agita al independentismo: "Sabemos que es difícil, que el Estado no nos lo pondrá fácil y que no nos regalará nada".

Ha destacado que el potencial de Catalunya se ve "limitado por un déficit fiscal" y una gestión de infraestructuras desde fuera del territorio catalán, poniendo de ejemplo el caso de Rodalies.

El presidente catalán ha alentado a "enfrentar los retos de cara y darles una salida en clave catalana, que genere nuevas oportunidades y más prosperidad" en referencia a frentes como el cambio climático, la transición energética, la digitalización o el cambio demográfico.

Después ha añadido que "no hay nada imposible" y anima a los catalanes a salir a la calle durante el día de la Diada. "Mañana llenaremos las plazas y calles, como siempre hemos hecho: con todo el orgullo. Poniendo en valor todo lo que nos une. Todo lo que nos define como nación" También ha dicho que el camino a seguir pasa por ser firmes, negociar y dialogar "para superar definitivamente la represión" y asentar las bases para que los catalanes puedan votar su futuro político en un referéndum según él.

Para ello, ha defendido la unión de los independentistas y alcanzar una propuesta conjunta: "Si sumamos esfuerzos y trabajamos juntos tendremos mucha más fuerza para aprovechar todas las oportunidades que se nos abren". Después, Aragonès ha propuesto iniciar de forma inmediata una nueva fase de negociación "centrada única y exclusivamente en el fondo del conflicto".

Sobre el catalán, Aragonès ha querido subrayar que "más que nunca hace falta dar un nuevo impulso a la lengua catalana" porque, según él, es el pilar de la nación catalana y un elemento de cohesión social.

Ha dicho que la oficialidad del catalán en el Parlamento Europeo y su uso en el Congreso sería "un gran avance hacia el total reconocimiento nacional de Catalunya".

"Debemos ser conscientes de que el reconocimiento institucional no es suficiente, que tenemos la responsabilidad histórica de mantener viva la lengua y solo lo haremos si todos y todas nos conjuramos por hablarla", ha añadido.

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