Mikhail Fridman no cometió ningún delito en la compra de la cadena de supermercados DIA. El Juzgado Central de Instrucción número 4, según publica este lunes El Mundo, ha exonerado por completo al empresario ruso: "Ni Fridman ni su empresa Letterone ni terceros vinculados a ellos realizaron actuaciones dirigidas a provocar una caída en el valor de la cotización de las acciones de DIA que les permitiera una adquisición más ventajosa de la sociedad".
El juez José Luis Calama también asegura que Fridman ni nadie relacionado con él pudo "haber tenido acceso a información relevante sobre la citada sociedad cotizada que no fuera conocida por el resto de los inversores y les hubiera permitido conocer con la suficiente anticipación la situación real de la compañía".
Y lo hace a pesar de las conclusiones a las que llegó la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), que "sugería" que el empresario ruso "podría haber alentado posiciones en corto para provocar la bajada del precio de la acción e, incluso, habría favorecido noticias que incidieran en la grave situación financiera de la empresa", tal y como explica El Mundo en su noticia. Además, la UDEF indicó que desde su posición "habría rechazado las soluciones para aliviar esa situación financiera para crear un ambiente de decisión con dos alternativas: o la venta de la acción a un precio irrisorio o la liquidación de la empresa".
Decisión del juez
Pero el juez rechaza las conclusiones de la investigación de la UDEF e indica que "se desconocen los motivos que explican el incremento de posiciones en corto sobre las acciones de DIA".