España

Ana Botella: "Ni voy a dimitir ni voy a cesar a nadie de mi equipo"

Los informes de seguridad de las diferentes instalaciones del Ayuntamiento han llevado a la alcaldesa a la decisión de clausurar 'temporalmente' el Palacio de Congresos de Campo de las Naciones y el Palacio de Cristal del Retiro para poder adaptarlos a las actuales normas de seguridad. 

La alcaldesa de Madrid anunciaba en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno que tras haber estudiado los informes sobre seguridad en las instalaciones madrileñas, ha decidido cerrar el Palacio Municipal de Congresos del Campo de las Naciones y el Palacio de Cristal del Retiro. Como ha explicado, "los edificios se hacen en su momento adaptándose a las normas de seguridad en vigor, pero los tiempos cambian y las instalaciones se tienen que adaptar a las nuevas normas, más estrictas". 

La alcaldesa también ha dicho desconocer si la empresa organizadora de la fiesta de Halloween, DivierTT, continúa vendiendo entradas para las fiestas pendientes hasta final de año, ya que "ninguna fiesta se va a celebrar". 

Ana Botella dedicaba la segunda parte de su intervención a hablar exclusivamente del suceso del Madrid-Arena donde murieron 4 chicas y una quinta se encuentra en estado grave. Después de presentar sus condolencias públicamente a las familias, la alcaldesa explicaba que su compromiso es tomar todas las decisiones que sean necesarias para intentar que nunca más se produzca una tragedia similar. 

"No sé si DivierTT sigue vendiendo entradas, pero ninguna fiesta se va a celebrar", explicaba

Por este motivo explicaba que había ordenado la adopción de cinco medidas, respaldadas por unanimidad por el equipo de Gobierno municipal. "Se hará una investigación interna para ver si hubo alguna negligencia o irregularidad en la actuación del Ayuntamiento. Creo en la honestidad de todos los empleados municipales y en la presunción de inocencia como elemento básico, pero si la hubiera habido exigiré hasta la última de las responsabilidades", decía Botella. 

En la misma línea, explicaba que se ha aceptado la creación de una comisión de investigación, y que el 16 de noviembre habrá un pleno para que ésta se constituya. La máxima celeridad y transparencia para que se conozca cuanto antes la verdad son los principales factores que ha destacado la alcaldesa. 

Botella aprovechó para repetir la decisión tomada poco después de que ocurriera la tragedia el pasado uno de noviembre de no alquilar las dependencias municipales para eventos de este tipo. Según especificaba, se autorizarán solamente aquellos eventos que tengan una numeración, un número de sillas determinado y el público esté sentado. 

La alcaldesa dice no arrepentirse de su viaje a Portugal pero elude comentar nada sobre el asunto porque se trata de un 'viaje privado'

La quinta medida la enunció la alcaldesa a raíz de un estudio exhaustivo que propuso Pedro Calvo sobre la seguridad de todos los edificios e instalaciones que se alquilan para eventos y que pertenecen al Ayuntamiento. "Los resultados los estudié ayer (por el miércoles) detenidamente, y tomaré las medidas para cerrar preventivamente aquellos que no cumplan con los requisitos según la legislación vigente", comentaba. 

Preguntas incómodas

La alcaldesa se sintió especialmente 'acorralada' con algunas preguntas que ponían en duda informaciones que acababa de hacer públicas o sobre las que desconocía la respuesta. Tras dejar claro que no se había planteado dimitir y que no pensaba cesar a ningún cargo, explicaba que las supuestas deficiencias del Madrid-Arena que aparecían en los informes aparecían subsanadas a fecha de 19 de octubre, 12 días antes de la macro fiesta. 

También admitió Ana Botella que la Policía no interrumpió el consumo de alcohol que había en los alrededores del recinto ya que la prioridad era la seguridad en el interior del mismo. "Se montó un dispositivo que prohibía el alcohol en un perímetro de unos 50 o 60 metros, pero lo prioritario era el interior", admitía. 

Por último, la alcaldesa eludió contestar a una pregunta que le instaba a explicar si, como había declarado ella anteriormente, 'se piensa igual en la tragedia en su despacho del Ayuntamiento de Madrid que en un spa de lujo en Portugal'. "Mi viaje es un viaje privado", decía. Pero al instarla a responder si se había arrepentido, la alcaldesa era tajante: "No", zanjaba. 

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