La seguridad personal del presidente norteamericano Barack Obama será prestada por seiscientos agentes de distintos servicios de seguridad norteamericano, entre ellos el Servicio Secreto de la Casa Blanca, la CIA y el FBI, que le acompañarán en su visita a España. Dichos agentes conforman los círculos de protección más próximos al presidente, mientras las fuerzas de seguridad españolas, en torno a cuatro mil policías, según fuentes del Ministerio del Interior, se encargarán de los servicios de contravigilancia y de la protección estática y en los desplazamientos.
Agentes de subsuelo controlan desde hace varios días las alcantarillas de Madrid en el recorrido que el presidente de EE.UU. efectuará durante su estancia en la capital, y especialistas de los servicios de información analizan cualquier hipótesis terrorista que suponga un mínimo riesgo para la visita. Por su parte, agentes uniformados se encargan de dar visibilidad a un despliegue policial disuasorio en las calles.
Fuentes sindicales de la Policía han criticado a este diario el dispositivo organizado, para el que ha sido necesario destinar funcionarios de las comisarías de distrito, ya bastantes justas de personal por las vacaciones estivales. "La visita de Obama se conoce desde hace mes y medio, tiempo suficiente para prever adecuadamente el dispositivo de seguridad, y pese a ello se ha tenido que improvisar". Una situación, dicen, que ya se dio con la celebración del día del Orgullo Gay en la capital.
La Policía española se encargara de los servicios de contravigilancia y de la seguridad estática y en los desplazamientos
La llegada de Barak Obama a España está prevista para las diez de la noche del sábado. El mandatario norteamericano viajará desde Varsovia, tras participar en una cumbre de la OTAN. Sin embargo, aunque estaba previsto que aterrizase en el aeropuerto de San Pablo, en Sevilla, finalmente lo hará en Madrid, ya que el mandatario norteamericano ha decidido acortar su visita a nuestro país por el tiroteo de Dallas.
El domingo estaba prevista una visita a la ciudad, pero tras el nuevo plan, sólo acudirá a la base norteamericana de Rota. Lo previsto era que durante las aproximadamente 15 horas que iba a pasar en la capital hispalense 500 efectivos de Policía se encargaran de velar por su seguridad y se cerrarase el tráfico en el centro de la ciudad, lo que iba a obligar a desviar el transporte público que habitualmente discurre por él. La noche del domingo la pasará, previsiblemente, en la Embajada de Estados Unidos en la capital por motivos de seguridad.
Inicialmente el lunes estaba previsto como el último día de la visita oficial, en el que se iba a reunir con el rey en el Palacio de la Zarzuela y posteriormente con Mariano Rajoy, presidente en funciones, en el Palacio de la Moncloa. Pero fuentes de la Casa Blanca han confirmado que el encuentro no tendrá lugar ese día.
El plan original también contemplaba que, tras almorzar con los reyes en el Palacio Real, que permanecerá cerrado al público desde el sábado hasta el martes, a excepción de la Armería y la exposición “De Caravaggio a Bernini”, se reuniese con los líderes del PSOE, Podemos y Ciudadanos, Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera, respectivamente. Tras concluir las entrevistas iba a mantener un encuentro con jóvenes en los Teatros del Canal, y esa misma noche iba a regresar a Washington desde la base aérea de Torrejón de Ardoz. Pero finalmente Obama tomará el avión de vuelta la noche del domingo, un día antes de lo previsto. Concluirá así la primera visita a nuestro país de un presidente norteamericano desde que en 2001 lo hiciera George W. Bush.