Los vuelos desde Casablanca a Barajas están en el punto de mira de los agentes de la Policía Nacional. Los funcionarios han detectados que de forma constante decenas de los pasajeros de estos trayectos de la compañía Royal Air Maroc son los que después acuden a solicitar el asilo, según informan fuentes policiales a Vozpópuli. Una práctica diaria que ha provocado en parte la saturación de las salas del aeropuerto madrileño y ha provocado que el Ministerio del Interior reabra el CIE de Aluche para acoger a estas personas.

Los agentes que vigilan Barajas han detectado una práctica que se ha convertido en diaria entre los solicitantes de asilo que proceden de Marruecos. Estas personas llegan en el vuelo de las 20:30 horas desde Casablanca y aterrizan en Madrid.

Nada más llegar a la capital rompen su documentación, que en algunos casos es falsa, y después acuden a solicitar el asilo. Al estar sin su identificación ganan tiempo en nuestro país hasta que los agentes llevan a cabo todas las verificaciones para aceptar o no su condición.

Esta circunstancia se lleva realizando desde hace semanas y ha generado un gran colapso en las salas de asilo. Una situación que ha provocado el "hartazgo" de los policías que han comunicado el "colapso" que están sufriendo a las autoridades competentes. Según han informado fuentes del Ministerio del Interior a Vozpópuli, la relación entre España y Marruecos es "fluida" y la colaboración es permanente dentro del ámbito bilateral de ambos países.

Desde Casablanca a Barajas

Con todo ello, Royal Air Maroc está colaborando en las últimas fechas con los investigadores españoles. Y es que para viajar a Barajas estos inmigrantes deben entregar su documentación a la compañía antes de subirse al avión. Una identificación que no presentan a la hora de solicitar el aviso.

Por ello, la empresa de aerolíneas está proporcionando a la Policía Nacional una copia biográfica de las personas que después solicitan el asilo en nuestro país. Este informe es clave para determinar las circunstancias de estos inmigrantes.

Y es que muchos de estos marroquíes se están acogiendo a que son menores de edad. "Tienen hasta canas y dicen que han nacido en 2007", explican estas fuentes policiales a Vozpópuli. Las evaluaciones médicas de los solicitantes de asilo de Barajas también han provocado el colapso de la Fiscalía de Menores y de los sanitarios del Hospital Gregorio Marañón.

Fuentes de la Fiscalía de Menores han expresado a Vozpópuli su preocupación por las circunstancias actuales ya que también en los últimos años se ha reducido la plantilla del Ministerio Público. "El problema se presenta a la hora de verificar la auténtica edad de los menores", señalan estas fuentes.

Para esclarecer los casos, la Fiscalía está trasladando a estas personas al Hospital Gregorio Marañón, que también presenta un desborde importante. Es el lugar donde se le hacen las pruebas radiológicas. Este informe médico es clave. También se realizan exámenes odontológicos. Todo con el objetivo de verificar la edad de los solicitantes.

El CIE de Aluche

Conocedores de las irregularidad de sus peticiones, algunos de los marroquíes están planeando como salir de Barajas. El sábado 13 de enero, 17 marroquíes se fugaron de las salas de inadmitidos. De este grupo de fuga, sólo se ha conseguido localizar a uno que se lesionó durante la escapada. Volvió al lugar cojo para recuperar su teléfono móvil.

Estos intentos han sido frenados con éxito en las últimas horas. Un grupo de estos inmigrantes realizaron un butrón en uno de los baños para poder escapar al exterior. Los agentes de Policía Nacional descubrieron sus intenciones.

Para aliviar la saturación de las salas de solicitantes de asilo, el Ministerio del Interior decidió reabrir el CIE de Aluche, que estaba en obras, para poder acoger a estas personas. Una decisión que generó dudas jurídicas entre los mandos y finalmente fueron pocas las personas trasladadas a este centro. Solo se enviaron a estas dependencias a los inmigrantes a los que se rechazó su solicitud en Barajas.

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