Cuatro personas han sido detenidas acusadas de formar parte de una banda cuyos miembros se hacían pasar por empleados de compañías eléctricas o de gas para acceder a los domicilios, donde sustraían joyas y dinero, y que actuaban por todo el país, según ha informado hoy la Policía Nacional.
La desarticulación de este grupo ha sido posible gracias a la Operación Iberoca, llevada a cabo de forma conjunta entre el Grupo de Delincuencia Especializada (UDEV) del Cuerpo Nacional de Policía de Alicante y el Equipo de Investigación de la Guardia Civil de Hellín (Albacete).
A los arrestados, de entre 40 y 53 años, todos ellos vecinos de Alicante, se les imputan diez delitos de robo con fuerza, hurtos y estafa cometidos en Castellón, Valladolid y en las localidades albaceteñas de Tobarra y Villarrobledo.
Las investigaciones comenzaron a mediados del pasado mes de noviembre, cuando la Guardia Civil de Tobarra tuvo conocimiento de un robo con fuerza perpetrado en un domicilio de esa población.
Modus operandi
Los integrantes de la banda efectuaban al azar numerosas llamadas telefónicas, haciéndose pasar por empleados tanto de compañías eléctricas como de gas, al objeto de concertar citas para una supuesta revisión en las instalaciones.
Una vez desplazados a la localidad, se presentaban en las casas de las víctimas, generalmente personas de avanzada edad, ataviados con ropas similares a la de los empleados autorizados de estas empresas.
Ya en el interior del domicilio, distraían a la víctima buscando una supuesta avería, momento en el que uno de los componentes del grupo aprovechaba para registrar la vivienda en busca de dinero y joyas.