Dos horas de espera y una de declaración, pero Miguel Blesa aún permanece en la Audiencia Nacional. El expresidente de Caja Madrid entre 1996 y 2010 no ha podido abandonar aún el edificio judicial después de que el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4, Fernando Andreu, le haya ordenado que permanezca en el mismo a la espera de que concluya la comparecencia de su sucesor, Rodrigo Rato, y le notifique una decisión que le afecta.
El fiscal Anticorrupción, Fernando Luzón, ha pedido formalmente al juez que le imponga una fianza civil de 15,2 millones de euros por el dinero derrochado por los consejeros mientras él fue el máximo responsable de la entidad financiera. La cantidad solicitada como fianza para Rodrigo Rato es de 245.000 euros, cantidad que corresponde al gasto con las tarjetas black durante la época de Bankia, en la cual él estaba al frente de la entidad. De esos 245.000 euros, 197.000 ya se han recuperado y los otros 47.000 restantes corresponden también a gastos de directivos, pero del período de Caja Madrid.
Blesa llegó a la Audiencia Nacional poco antes de las dos de la tarde, dos horas antes de la hora a la que le había citado el magistrado, para evitar los gritos de los preferentistas, que a esa hora permanecían en las proximidades del edificio judicial en un pequeño número. Durante el tiempo de espera, el expresidente de Caja Madrid ha permanecido sentado en un banco junto a la sala donde estaba declarando quien fuera su mano derecha, Ildefonso Sánchez Barcoj, en compañía de una letrada del despacho de abogados que le defiende. Se mostraba tranquilo e, incluso, mostraba una sonrisa a las personas que se dirigían a una máquina de bebidas que se encontraba junto a él. Finalmente, sobre las cuatro y cuarto de la tarde, entraba a declarar. Su comparecencia ha durado algo menos de una hora y aún no ha trascendido su contenido.
Fuentes jurídicas sí han concretado que el fiscal Anticorrupción ha solicitado al magistrado la imposición de una fianza millonaria por una cuantía que no ha especificado, aunque ha señalado que se debe corresponder con el dinero que él y sus consejeros dilapidaron mientras él ocupó la presidencia de Caja Madrid. Algunas acusaciones ya habían anunciado antes de iniciarse las declaraciones de este jueves que tenían intención de pedir, además, otras medidas cautelares de tipo personal, como la retirada de pasaporte o comparecencias periódicos ante la Audiencia Nacional. De ser así, el juez tomará una decisión al término de la declaración de Rato en una vistilla en la que las partes expondrán su posición. Mientras llega ese momento, Blesa espera en una sala aledaña a la espera de que el juez le notifique una decisión.
