Un año más, la selectividad -también conocida como EBAU- no será común en todas las comunidades autónomas. La petición por la que aboga el Partido Popular, además de miles de estudiantes de toda España, ya es todo un clásico. El cambio de modelo de examen forma parte del debate político desde hace años, y aunque parecía que llegaría a buen término, por el momento habrá que esperar, aunque sí ha habido pequeños cambios que afectarán a los estudiantes.
La pasada semana todos los ojos miraban a Bilbao, donde los vicerrectores de la Sectorial de Asuntos Estudiantiles de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españoles (Crue) se reunían para llegar a un acuerdo. Finalmente, los resultados fueron escasos. El grupo solicitaba al Gobierno que se retrase la polémica selectividad para extranjeros: una nueva prueba presencial para aquellos alumnos no comunitarios que quieran cursar una carrera universitaria en España. Se trata de una medida que preocupa a las universidades, ya que podría provocar que muchos de estos estudiantes opten por otros países para desarrollar sus estudios.
Los cambios de la nueva selectividad
Aunque los cambios son reducidos, los alumnos y estudiantes que preparan la selectividad este 2024 deberán estar atentos a estas pequeñas modificaciones que podrían tener un gran impacto en la nota final de sus exámenes. El primero de todos es la ortografía: tendrá más peso en una asignatura en concreto, Lengua Castellana. Antes, las faltas ortográficas tenían un peso de hasta el 10% -es decir, un punto sobre la nota final-. Ahora, el peso se dobla, por lo que podrían llegar a restar al estudiante hasta dos puntos.
La elección entre varias preguntas continúa siendo posible, aunque las autoridades hablan de que esto no implique "en ningún caso la disminución del número de competencias específicas objeto de evaluación". Es decir: los alumnos ya no podrán descartar más de la mitad del temario, por lo que deberán dedicar mayor tiempo al estudio. Aún así, no se sabe de forma concreta cómo se aplicará esta medida.
Fechas y criterios comunes
Otro de los cambios más significativos de la nueva selectividad son sus días de celebración: se instaura una fecha única para todas las comunidades autónomas. El examen se celebrará el 3, 4 y 5 de junio de 2025, algo que ya pactaban los distintos territorios con el PP el pasado mes de julio. De la misma forma, otros factores que también se pretendía homogeneizar, como el contenido de las pruebas, aún deberán esperar por lo menos un año más.
La propuesta para próximas pruebas consiste en crear "un observatorio" integrado por un especialista de cada distrito responsable de la redacción de los enunciados de las distintas pruebas. Con esta medida, el objetivo es "analizar en profundidad la estructura de los 17 exámenes y los resultados de las pruebas, y proponer las líneas comunes que armonicen dichos exámenes".
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