La sectorial de Defensa de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) ha elaborado un informe donde proyecta cómo debería ser la Armada de guerra de un hipotético Ejército de Cataluña en caso de que alcanzara la independencia. El documento, titulado Dimensionamiento de las Fuerzas de Defensa de Cataluña I: la Fuerza Naval, establece los recursos personales y materiales que sería necesarios para "asegurar el control de nuestras aguas territoriales".
Como primer paso a seguir, el informe aboga por la puesta en marcha de una Academia Naval en un máximo de tres años tras la proclamación de la independencia. Dicho organismo sería el encargado de formar a los futuros oficiales y suboficiales. Para ello, dice el texto, habría que llegar a un acuerdo con algún otro Estado -se recomienda el Reino Unido como mejor candidato- que pilotaría la instrucción de estos efectivos. A medio y largo plazo se prevé ya que "todo el personal surja de la propia Fuerza Naval catalana".
A continuación, la sectorial de Defensa propone la creación de una Patrulla Litoral que defienda las aguas territoriales, la protección de infraestructuras portuarias, la lucha contra el contrabando y el narcotráfico, el salvamento marítimo y el apoyo contra catástrofes. A partir de aquí, la ANC llama a tejer alianzas con diferentes instituciones internacionales que trabajan en la defensa del Mediterráneo, para lo que plantean un Comando de Escolta. Para aquellas actuaciones fuera del Mediterráneo, los autores del informe proponen un Comando Expedicionario.
Para aquellas actuaciones militares que se desarrollen fuera del Mediterráneo, los autores del informe proponen la creación de un 'Comando Expedicionario'
En total, la sectorial de Defensa cifra en 2.000 efectivos el personal necesario para que funcione una eventual Marina catalana, un número podría aumentarse o reducirse según el sistema de reservistas. El documento contempla aquí un servicio militar voluntario. Además, en un principio, señala la ANC, "muy probablemente, Mossos d'Esquadra así como policías locales y portuarios tendrán que sumar esfuerzos en algún organismo temporal de seguridad marítima". Al no disponer de bases navales, la plataforma cuenta con que dispondrá de "los bienes inmuebles" que tiene el Ministerio de Defensa en Cataluña, que serían reclamados en caso de prosperar el plan secesionista de Artur Mas.
Participar en operativos OTAN
En una primera fase, La ANC propone adquirir 3-4 patrulleras de altura (de 1.450 Tm), 2-3 patrulleras litorales (de entre 45 y 274 Tm), 4-6 aeronaves no tripuladas (drones), 4-6 embarcaciones no tripuladas, y un remolcador de altura. Un operativo que debería estar listo en "unos diez años a partir de la independencia". La segunda fase, entre diez y quince años después de la secesión, incluye ampliar el personal de la "Marina catalana", participar en operativos internacionales militares como los de la OTAN, la apertura de un Cuartel de Operaciones Navales y la adquisición de 3-4 corbetas polivalentes (de 1.000 a 1.200 Tm y de 80 a 100 metros de eslora) y de una flotilla auxiliar (un petrolero de escuadra y un buque logístico).
La tercera y última fase consistiría en la creación de un Cuartel General Conjunto Expedicionario con un Multi Role Vessel (fragata de 6.300 Tm), una corbeta, una Offshore Patrol Vessel y una flotilla auxiliar.