El Govern no da el dato de cuánto se ha gastado en la campaña "Si et canvien de llengua, no et tallis" ("Si te cambias de lengua, no te cortes) una iniciativa lanzada en septiembre del año pasado por el Departament de Recerca y Universitats para la "defensa del catalán" en la Universidad, que busca remediar los cambios al castellano que hacen los docentes durante su lección en las aulas.
La diputada de Ciudadanos, Noemí de la Calle, requirió al Govern que respondiera por escrito al gasto que esto ha supuesto a las arcas públicas de la Generalitat y el responsable no ha dado a conocer esta cifra en su respuesta parlamentaria. Más bien, el conseller de Recerca, Joaquim Nadal i Farreras, se ha limitado a justificar que es una campaña que se basa en "los principios de transparencia y seguridad lingüísticas en el uso de las lenguas en la docencia" recogidos en el Plan de fortalecimiento del catalán en el sistema universitario.
"Buzones delatores"
Como explica la diputada a Vozpópuli, se trata de una campaña publicitaria hispanófoba que hace uso del dinero de todos los catalanes para crear "buzones delatores lingüísticos para señalar a los profesores que hablaran en español en las aulas", afirma. "Decidí preguntar por el coste económico que supuso para todos los catalanes publicitar la creación de buzones de chivatos lingüísticos (...) ante lo que presuponemos que fue un gasto millonario, dada la entidad de los canales de difusión que utilizó la Generalitat de Cataluña".
El grupo ha pedido el coste del diseño, la ejecución, la publicidad institucional y la promoción de pago en redes sociales así como los acuerdos con la Plataforma per la Llengua. No se lo han facilitado en la respuesta del conseller en el Boletín Oficial del Parlament de Cataluña (BOPC), es más, lo han ocultado desviando la atención y señalando las denuncias lingüísticas generadas en el ámbito universitario.
El conseller argumenta en su respuesta que la campaña está focalizada en el catalán por las quejas e incidencias proporcionadas por las mismas universidades que indican que es la lengua más afectada con "cambios injustificados". A lo largo del año pasado se dejaron 41 quejas en estos buzones de, según explica, asignaturas que se tendrían que haber impartido en catalán pero se dieron en castellano excepto en dos casaos de asignaturas que se tendrían que haber impartido en inglés y se acabaron dando en castellano.
Ciudadanos replica a la Mesa
Como denuncia la diputada, la respuesta de la Generalitat "oculta el coste de la campaña informativa" y "transmite las bondades de manera pseudofilosófica". "En ninguna parte se expone el coste económico del señalamiento de los hispanohablantes en la Universidad". "Considero que se ha vulnerado mi derecho a la información y mi derecho de participación política", declara y como medida el partido ha presentado de nuevo a la Mesa tener amparo e insistir al Govern para que responda y haga esta información pública. Como explica Ciudadanos, se debe saber cuánto han pagado los catalanes para publicitar los buzones delatores "bajo el apercibimiento de acudir al órgano de garantía del derecho de acceso a la información pública del Parlament de Cataluña".