El líder de Ciudadanos en Cataluña, Carlos Carrizosa, ha mantenido su resistencia numantina hasta el final. De nada han servido los esfuerzos del ex secretario general de CS, Adrián Vázquez, ni el empuje de Jordi Cañas para convencer a Carrizosa y su guardia pretoriana de que el acuerdo con el PP era el mejor desenlace para la formación centrista. Vozpópuli ha podido conocer en exclusiva los términos del pacto al que se había llegado hasta esta semana con el PP, antes de que las negociaciones fueran dinamitadas por las intervenciones de Carrizosa en diversos medios de comunicación.
"Para las elecciones europeas se habían acordado dos puestos de salida en la lista. En cuanto a las catalanas, estaban dispuestos a darnos entre tres y cuatro puestos de salida", confirman fuentes de toda solvencia. Los nombres todavía eran una incógnita -no se ha podido llegar a ese punto de la negociación-, pero parecía clara la presencia de Adrián Vázquez en las listas europeas. Según fuentes catalanas, el otro puesto lo habría ocupado Eva Poptcheva. Una oferta que la antigua dirección de CS califica de "generosa".
"Las conversaciones se estaban teniendo desde hace tiempo, pero Carlos Carrizosa se encarga de desbaratarlo todo cuando sale en medios este lunes para marcar distancia. Está claro que los catalanes no querían acuerdo de ningún tipo", añaden las mismas fuentes.
El equipo catalán solo contemplaba la coalición, ir en solitario, o no presentarse, en base, argumentan, a los estatutos del partido.
El Partido Popular se ha mostrado receloso a un pacto con Ciudadanos tras los movimientos de Carrizosa. Los populares temían una escisión una vez formada la coalición. "No podían permitirse una brecha en el grupo parlamentario".
Fuentes cercanas a Adrián Vázquez lamentan que todavía haya "gente en Ciudadanos Cataluña que argumente que tienen el doble de diputados que el PP. No quieren ver la realidad. Ciudadanos es una estrella muerta, que se apaga en Cataluña, y de la que podemos ver apenas sus últimos destellos".
El lunes, Vozpópuli ya recogía el posicionamiento del equipo catalán, que llevaba un 'no' rotundo como estandarte ante la posibilidad de integrarse en las listas del PP para las elecciones del 12-M. La posición del brazo autonómico y cuna fundacional de los 'naranjas' ha acabado precipitando un cisma total en el que el secretario general, Adrián Vázquez, ha acabado dimitiendo.
Crónica de un desenlace anunciado
La cúpula intentó rebajar el músculo de Carrizosa invitándole a mantener un perfil bajo, sin embargo, cuanto más se mantenía la postura de la integración al PP, con más ahínco se resistía Carrizosa a que las siglas de Ciudadanos desaparecieran, como también rechazaban varios pesos pesados del partido como Joan García, miembro de la Comisión Permanente.
Al calor de las tensiones, que crecían 24 horas antes de la celebración del Comité Nacional de este viernes, llegaban las acusaciones cruzadas y encriptadas entre ambos líderes el jueves, día en el que, en realidad, se iba a celebrar la reunión para decidir el futuro de CS. Váquez acusaba en público a Carrizosa, sin nombrarle, de solo mirarse el ombligo y Carrizosa sugería en conversaciones con los medios que las negociaciones solo estaban sirviendo para asegurar los puestos de salida de unos pocos, sin tener en cuenta el peso, la trayectoria, y las "sensibilidades" que CS seguía representando en Cataluña.
Sin embargo, la posición de la cúpula ha sido pragmática y realista, en la línea de Génova, con el poco margen que quedaba para la campaña electoral en Cataluña. El Partido Popular nunca vio una opción la coalición por al rédito que las siglas seguían en Cataluña, en contraposición con el peso electoral de Ciudadanos para las autonómicas. El último 'CIS catalán', de este jueves, no le daba representación en la cámara catalana.
"Habría sido un final estupendo. Una reunificación fantástica e histórica. Lamentablemente, los mismos que decidieron no cambiar el nombre del partido en la refundación nos han llevado a esta situación", expresan fuentes próximas a Vázquez.
El paso atrás de Adrián Vázquez deja el puesto de responsabilidad al coordinador nacional hasta que se celebran las Primarias, el navarro Carlos Pérez-Nievas, quien ha estado implicado a fondo en todas las negociaciones como puente entre Cataluña y Madrid.
Termopidas
Cs ya no es nada... Los fundadores ya no están.. Quedan unos cuantos valiosos, pero muy pocos... Cs, lo que le quedan, son chiflados extremistas del estilo Carrizosa. Intentar resucitar a Arrimadas, hubiera sido un error gravísimo... su tiempo, ya paso.. En la mente de los votantes, queda, que los abandono para irse a Madrid.. Eso fue su tumba.. PP no pierde nada, con el no acuerdo.. Al contrario, ha sido coherente para los votantes constitucionalistas..
Severino Mejias Robles.
¡Qué difícil les resulta pactar y coaligarse a los partidos españoles!. Sobre todo de la derecha. La postura cerril de Carrizosa y acólitos está fuera de todo pragmatismo y eficacia política. La única posibilidad, en mi opinión, de que los ideales de Cs perdurasen es mediante su integración en el PP y así centrando más a los Populares en Cataluña. Bueno, ya da igual, porque Ciudadanos lleva políticamente muerto desde hace mucho. Ya lo dijeron los italianos, (Andreotti), sobre la política española: "manca finezza". Falta finura. Así es.
syloxozi
Ciudadanos con Albert Ribera era la esperanza blanca del centrismo español. Ciudadanos sin Albert Rivera no son nada mas que una panda de teleñecos. Pues a tomar por saco, Ciudadanos.
Termopidas
Era un buen acuerdo, que favorecía a C's, pero los intereses personales priman sobre los ciudadanos... Pierde el constitucionalismo y se favorece al PSC... Carrizosa lo pagará en las urnas...y Cs desaparecerá, lo poco que queda en Cataluña...
Birmania
Es evidente que el progreso de España les importa un rábano, ellos van a su poltrona.