Carles Puigdemont prosigue con su plan desde Waterloo. El expresidente prófugo de la Justicia española ha impuesto los cambios en la Generalitat presidida por Quim Torra.
Elsa Artadi, hasta hoy consejera de Presidencia, deja el cargo para sumarse a las listas municipales de JxCat. La ahora exconsejera será sustituida por Meritxell Budó, mientras que Laura Borràs, exconcejera de Cultura, ha dejado el cargo para ir a las listas de las generales del PDeCat, su sustituta es Mariàngela Vilallonga.
Torra había firmado este domingo el cambio en el gobierno autonómico y manteniendo la hoja de ruta diseñada por Puigdemont, el jefe de JxCat desde Bruselas.
Torra ha mostrado su agradecimiento a ambas, elogiando su labor y lucha "contracorriente" para hacer más llevadera la vida de los ciudadanos. En su intervención, el presidente catalán ha agradecido "el trabajo hecho".
Budó y Villalonga han tomado posesión del cargo este lunes en el Palau de la Generalitat. La primera es miembro de la directiva del PDeCat y está ligada a las tesis de Puigdemont. La alcaldesa de La Garriga desde hace ocho años se une ahora al centro de decisión de la Generalitat, y proviene del núcleo de la antigua Convergencia Democrática de Cataluña (CDC). Su labor pasa por ser la voz de Puigdemont en el seno del Ejecutivo autonómico, papel desempeñado por Elsa Artadi, cuyo destino es la lista municipal de JXCat por Barcelona, elenco encabezado por Joaquím Forn, en prisión preventiva.
Villalonga, por su parte, es la vicepresidenta segunda del Institut d’Estudis Catalans (IEC), ente público en el que trabaja desde 2005. La consejera de Cultura cuenta con el reconomiento de Puigdemont, quien se ha deshecho en halagos: "Es una de las mujeres más cultas que he conocido. Y al mismo tiempo con una capacidad de diálogo tan grande como la solidez de sus convicciones", ha afirmado Puigdemont.
Torra ha asegurado que las dos exconsejeras han sido un "soporte imprescindible", remando a contracorriente para la mejora de la calidad de los ciudadanos.