La ministra de Educación, Isabel Celaá, valoró de forma "muy positiva" el inicio del curso escolar y destacó que solamente 53 centros de 28.600 habían detectado incidencias. Sin embargo, en menos de una semana, ya son más de 200 los colegios que se encuentran bajo supervisión por el aumento de casos.
La cantidad continúa siendo mínima en comparación con el total de colegios, pero el crecimiento exponencial en tan solo cinco días no ayuda a calmar los ánimos en la comunidad educativa. Este miércoles arranca la huelga estudiantil convocada por el Sindicato de Estudiantes (SE) para los días 16,17 y 18 se septiembre.
Según la organización sindical, que se autodefine como una organización "de izquierdas, revolucionaria y anticapitalista", el departamento capitaneado por la dirigente socialista habría mostrado "desidia".
El ministerio -dicen- se negó a a poner en marcha un plan unificado para rescatar a la educación pública invirtiendo recursos masivos. Acusan a Celaá de haber tenido "meses" para preparar una vuelta a las aulas "en condiciones dignas" pero "no ha hecho nada".
El sindicato señala que después que los jóvenes "han tenido que soportar durante meses una repugnante campaña acusando a la juventud de los rebrotes de la Covid-19", ahora "se nos arroja a las aulas sin ningún plan y en pleno auge de la pandemia".
Estos estudiantes consideran que "un Gobierno de izquierdas debería poner en marcha inmediatamente un plan de rescate a la educación pública para revertir esta situación pero hasta ahora han renunciado a ello dejando en la cuneta a las familias trabajadoras, las más castigadas por el coronavirus".
Más profesores, menos ratios
Entre las reivindicaciones de la huelga figuran "el derecho a una educación pública presencial, de calidad y con aulas seguras" y "un plan de inversión masivo para la contratación de profesorado, la reducción de ratios y el fin de la brecha digital". Exigen que no se vuelva a repetir el "desastre" de la educación online.
Además, el jueves día 17 de septiembre están previstas movilizaciones en diversas ciudades a partir de las 12.00 horas. Los convocantes piden a los asistentes que respeten todas las medidas sanitarias de seguridad y lleven mascarillas.
Pero el pulso sindical ya se ha manifestado a nivel regional. El Gobierno de País Vasco, cuyos nuevos consejeros juraron los cargos el pasado lunes, afrontó su primera huelga general convocada este martes en el sector educativo.
El paro fue convocado por los sindicatos ELA, LAB, Steilas, CCOO y UGT, que al término de la jornada calcularon en torno a un 70% de seguimiento. El Departamento de Educación rebaja el porcentaje al 41,9%.
Mientras los sindicatos critican los servicios mínimos porque "buscan invisibilizar" las protestas, el lehendakari Íñigo Urkullu asegura que la huelga "solo aporta tensión e inseguridad".
Más de 200 incidencias en los colegios españoles
Precisamente, País Vasco es una de las autonomías más castigadas por el virus y por el cierre de aulas. Ya tiene 30 centros afectados. Solo por detrás de las incidencias que ha presentado Andalucía, que cuenta con 34 colegios con algún caso.
Aragón tiene 24 aulas cerradas y Castilla-La Mancha ya enviado a casa a los alumnos de 20 aulas. En la Comunidad de Madrid -donde los sindicatos docentes anunciaron una huelga para finales de septiembre, ya hay 26 clases confinadas.
En La Rioja, 14 centros han iniciado procesos de cuarentena; en Valencia y Castilla y León, 12; en Navarra, 11 centros y, en Cataluña, dos centros no han podido abrir y otros ocho se encuentran ya en cuarentena. Al igual que Madrid, la comunidad gobernada por Quim Torra, ha arrancado el curso bajo la amenaza de movilizaciones y sin que se descarte una huelga por la falta de docentes y recursos.
En su última intervención en el Congreso de los Diputados, Isabel Celaá respondió a las acusaciones sobre dejación de funciones mostrando su hoja de servicios en los últimos meses y recalcando que las competencias en materia de Educación están transferidas a las CCAA.
