Con las elecciones generales a la vuelta de la esquina y los partidos ultimando su estrategia de cara a la campaña electoral, el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha supuesto un nuevo jarro de agua fría para las expectativas de la formación de Pablo Iglesias de recuperar la posición que este mismo estudio le otorgó el pasado mes de enero, segunda fuerza política del país por encima del PSOE. La caída de votantes según este sondeo refleja que, pese a que Podemos se mantenga con un nada desdeñable 15,7%, la formación del círculo tiene motivos para preocuparse, ya que el apoyo de uno de los sectores que hasta la fecha tenían más peso en su voto, los más jóvenes -entre 18 y 24 años-, ha caído un 40% desde el CIS de enero.
Así lo detalla el último barómetro en su sección de voto+simpatía desgranado por edad, en el que el porcentaje de votantes en esta franja ha pasado de un 32'7% durante el mes de enero a un 19'6% registrado en este último estudio, realizado en julio. Este descenso, pese a haberse mostrado ligeramente en el CIS del pasado mes de abril, cuando el apoyo de los menores de 24 años descendió a un 28,5% - un 12,8% de retroceso respecto al mes de enero -, ha incrementado su caída en los meses de verano hasta perder casi 9 puntos y situarse tan solo 5 décimas por encima del PSOE, que ve cómo poco a poco va recuperando a parte del electorado más joven.
La encuesta, que ha sido realizada a través de entrevistas a 2.486 personas, refleja que entre esta caída de los menores de 24 años, que es incluso mayor en porcentaje en los votantes entre los 55 y 64 años (40,9%), y que la formación también nota en el resto de edades con caídas entre el 20 y el 33%, cabe destacar que la pérdida de apoyos tiene su mayor concentración en aquellos ciudadanos que no votaron en las pasadas elecciones, es decir, que tienen como mucho 22 años, siendo este retroceso del 47% - pasa de un apoyo del 37,2% en enero a un 19,6% en el mes de julio -.
Según el CIS, el voto de los estudiantes también se aleja de Podemos: cae un 43% en 6 meses
Pero los datos del CIS no solo reflejan la caída de apoyos, sino que además muestran quiénes han obtenido a estos nuevos votantes. El más beneficiado ha sido Ciudadanos, que ha pasado de no contar con suficientes apoyos como para ser contabilizados en el mes de enero al 10,9% de estos votantes, situándose por encima del PP (9,8%), que pese a recuperar parte del voto - ha duplicado su porcentaje de nuevos votantes -, sigue siendo el último de los cuatro partidos con mayor presencia en ganar este electorado. Por su parte, el PSOE (18,5%) logra subir cerca de 5 puntos desde el mes de abril, situándose también en este apartado cerca de Podemos.
Estudiantes y parados
Además, entre la pérdida de apoyo de los más jóvenes cabe destacar que el voto estudiantil del partido de Iglesias también se diluye en esta última encuesta del CIS, después de caer hasta un 43% desde el mes de enero. Este retroceso se deja ver en otros sectores que habían anunciado su intención de votar a la formación en anteriores estudios, y es que los parados y los obreros no cualificados, con unas caídas del 33,7% y del 39,5% respectivamente, también retiran parte de su apoyo a Podemos. Mientras tanto, algunos sectores como el de los empresarios, el personal administrativo u obreros cualificados mantienen su intención de voto a la formación, aunque con una leve caída.
Y es que Podemos ha perdido gran parte del apoyo que obtenía, según el apartado que fracciona al electorado en función de su posición socioeconómica, de los obreros no cualificados (9 puntos menos) o de las viejas clases medias (8,9 puntos menos), mientras que la caída es menor en la clase media/alta, las nuevas clases medias y los obreros cualificados, donde el retroceso se sitúa alrededor de los 6 puntos.
La causa: ¿la moderación?
Pero, ¿por qué ha dejado de recibir este voto la formación de Pablo Iglesias? Una de las razones podría estar en la posición ideológica dado que, según apunta el estudio del CIS, Podemos pierde un gran porcentaje de los votantes que se autodefinen más a la izquierda - en las posiciones 1 y 2 del espectro, siendo el 1 la posición más a la izquierda y el 10 la posición más a la derecha -.
Podemos pierde apoyos en todas las franjas de votantes por ideología, pero es más marcado entre los votantes más escorados a la izquierda
Si en enero el 51,1% de los entrevistados que se inclinaban por Podemos en voto directo y simpatía decían sintonizar con la posición más a la izquierda, en el sondeo de julio, el porcentaje se reduce al 39,4% y así va sucediendo en todas las posiciones, que, si bien en el mes de abril consiguió reunir su pico de apoyos en la franja del centro-centro derecha, este mes también ha caído con fuerza - desde un 17,8% en el caso de quienes se sitúan en el puesto 5, hasta un 6,8% en este estudio -. Los datos apuntan que Podemos sigue recabando algunos apoyos en la derecha moderada, entre las posiciones 6 y 8, más alla no tiene suficientes apoyos para computar, pero estos datos han perdido también fuerza respecto al mes de abril.
Caída en las encuestas
Desde que el pasado mes de abril el diario El País situara a Podemos primero en una encuesta de cara a las elecciones generales con el 22,1% de los votos, la formación no ha vuelto a recuperar la primera posición en los los sondeos y parece que ha caído en una vorágine, según la estimación de los estudios que se han ido publicando, de la que parece no acabar de salir. Si bien Podemos obtuvo un gran éxito en las elecciones municipales, uniéndose a las candidaturas de unidad popular que ellos mismos impulsaron en muchos municipios, logrando ayuntamientos como los de Madrid y Barcelona, el resultado en los comicios autonómicos no fue tan sonado y esta dicotomía no parece ayudar a su propósito de alcanzar La Moncloa.
(Gráfica que establece la media de la suma de todas las encuestas publicadas, mostrando así la tendencia. - Fuente: Wikipedia)
Las últimas decisiones del partido parecen haber pasado factura a Pablo Iglesias y a su equipo, que como vienen haciendo desde las elecciones europeas que les catapultaron a la cima del escenario político aprovecharán su buen hacer electoral en las últimas semanas de campaña para agitar a su electorado. Aún quedan cinco meses, si finalmente se celebran las elecciones el 13 o 20 de diciembre, para intentar convencer al electorado de que abandone al bipartidismo por los partidos emergentes. Aunque según parece indicar el barómetro del CIS tendrán que trabajar más de lo que apuntaba este mismo estudio en enero, cuando Podemos llegaba a coronar algunas encuestas.