Carlos Mazón ha retomado hoy, sin éxito, la posibilidad de alcanzar consensos con los grupos de la izquierda parlamentaria valenciana en una agria sesión plenaria que giraba en torno a la Ley de Amnistía y donde se han mostrado las diferencias siderales en torno a este asunto entre el bloque PP-Vox y el que conforman PSPV-Compromís.
Los valencianos no recogeremos la migajas que dejen otros y que han conseguido a base de chantajesCarlos Mazón
El presidente valenciano ha explicado durante su intervención que "los valencianos no recogeremos la migajas que dejen otros y que han conseguido a base de chantajes", mientras que la portavoz socialista, Rebeca Torró, afirmaba que "el Gobierno de Pedro Sánchez pasará a la historia como el que buscó soluciones para la convivencia en Cataluña".
Esta exposición antagónica ha llevado a Mazón a cambiar el paso en su segunda intervención y reconocer que "en este tema no estaremos nunca de acuerdo" por lo que se ha preguntado "¿qué tal si llegamos a acuerdos que beneficien al conjunto de los valencianos?".
Ronda de contactos
Mazón se refería a realizar una "ronda de contactos en los próximos días" en los que "tengamos una estrategia conjunta de diputados autonómicos y nacionales para condicionar la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado a la reforma del modelo de financiación autonómica, inversiones para la Comunidad Valenciana acordes a su peso territorial y poblacional, y un calendario 'creíble' de pago de la deuda en materia de dependencia y del gasto sanitario de los desplazados".
Además, ha incluido en esa oferta negociar "la renovación de los órganos estatutarios, que todos los grupos participen en la Mesa del Agua autonómica", así como alcanzar una postura común para lograr recuperar "el Derecho Civil valenciano".
Los pactos con Puig
Esta oferta suponía reabrir los pactos que Ximo Puig propuso a Mazón al comienzo de la legislatura durante la sesión donde el primero dejó de ser presidente de la Generalitat y el segundo accedía al cargo por primera vez.
Entonces fue Puig quien le propuso respetar durante la legislatura siete 'pactos' genéricos.
Igualdad, calidad democrática, energías renovables, función pública, así como el fomento del valenciano. Mazón, por su parte, añadió otros dos acuerdos más para avanzar de la mano del PSOE en una reforma del modelo de financiación y también en la reclamación de la llegada de más agua para las comarcas más necesitadas.
Papel mojado
Ya entonces, como hoy, PP y PSPV se comprometieron a avanzar en estos acuerdos, aunque en casi todos ellos expresaron matices y posiciones partidistas que vaticinaban que se quedarían en papel mojado.
La sesión de hoy no ha arrojado muchas diferencias sobre aquella. Mazón ha defendido su ofrecimiento y ha encontrado el vacío de Compromís que había abandonado el hemiciclo en bloque por una discrepancia con la presidenta de las Cortes.
Llanos Massó no ha dado el uso de la palabra por alusiones a uno de los diputados de Compromís, Juan Bordera, (en realidad en ese momento presidía el pleno el popular Alfredo Castelló) y sí lo ha hecho la propia Massó al regresar a su puesto en la Presidencia, también por alusiones, con la diputada del PP Beatriz Gascó.
Esa bronca ha imposibilitado que el guante lanzado por Mazón fuera recogido en la bancada nacionalista. Y en el PSOE ha habido silencio y una alusión por parte de Torró en su intervención en la que ha dicho que Mazón actuaba como un "bombero" agitando la calle y luego ofreciendo pactos.
"Salimos poco esperanzados"
La legislatura nace muy dividida y tensionada. Las fuentes del grupo parlamentario popular consultadas por Vozpópuli aseguran que respecto a este ofrecimiento de Mazón y su eco en PSPV y Compromís "salimos poco esperanzados".
En la coalición nacionalista no consideran muy en serio esa ronda que ha propuesto Mazón, mientras que en el grupo socialista aseguran que "la valoraremos", aunque no le dan credibilidad a las palabras del presidente valenciano.
