El juzgado de primera instancia número 2 de Madrid ha avalado a la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en el pleito que contra ella interpuso en junio de 2011 la Fenil, que reúne a los productores españoles de lácteos. Acusa a la organización por la publicación de un reportaje en el que se denuncia la caída de la calidad de la leche y una "alarmante" falta de controla la vez que se empobrecían sus cualidades nutricionales.
La OCU pudo difundirlo a más de 30 millones de lectores y espectadores, según la sentencia, a la que ha tenido acceso Vozpópuli. El 10 de octubre de 2011 era admitida la demanda de la Fenil contra la OCU, pero el pasado 26 de marzo, la juez Dª Cristina Fernández Gil la desestima y concluye que la Fenil tampoco ha podido demostrar que la calidad media de las leches españoles no ha bajado en los últimos diez años, al "no haberse hecho" un estudio similar al de la OCU.
Fraude en la producción
El estudio fue publicado el 21 de junio de 2011. Comparaba 47 marcas y leches de 277 establecimientos y revelaba la muy mala calidad de la materia básica y el "fraude" en los procesos de producción. En su nota de prensa, la OCU explicaba que las exigencias de la ley se habían relajado, lo que ha resultado en una leche de peor calidad y peores resultados que los que se encontraron hace una década. También la organización revela como los fabricantes usan leche de mucha antigüedad, con proteínas degradadas, la necesidad de añadir fosfatos y el uso de tratamientos térmicos muy agresivos que deteriotran su calidad.
La Fenil criticaba el estudio porque se había analizado una muestra de un único lote de cada una de las marcas de leche y entendía que los resultados habrían variado de haberse utilizado otro método. Pero la magistrada aprueba que lo que más repercusión tuvo fue la "manifestación de que había una alarmante falta de control de los fabricantes y un descenso de la calidad en cuando a las cualidades nutricionales y composición de la leche".
Sentencia apelable
Según han indicado a Efeagro fuentes de la Fenil, decidirá si recurre la sentencia o no cuando la haya analizado en profundidad. Han detallado que en una primera lectura el texto no satisface sus intereses ya que no responde a lo demandado, es decir si las actuaciones de la OCU y OCU Ediciones "dañaron o no la imagen y el buen nombre de todo el sector lácteo español."
