La Audiencia Nacional ha concedido un permiso penitenciario a la etarra Sara Majarenas, quien desde el pasado marzo cumple condena junto a su hija de tres años en una casa de acogida de Madrid. El motivo de este permiso, que disfrutará en el País Vasco, es que se pueda curar de una tuberculosis pulmonar de la que se infectó las pasadas navidades.
Según el auto del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria al que tenido acceso Vozpópuli, Majarenas abandonará su régimen penitenciario para someterse a tratamiento “con medidas de aislamiento y control necesarias durante 2-3 semanas”. Es por ello que se le concede el permiso por “el tiempo imprescindible y hasta tanto no cese la referida situación de aislamiento e ingreso u hospitalización domiciliaria”.
De hecho el juez de Vigilancia Penitenciaria, José Luis Castro, ha tenido que ampliar el pasado lunes un primer auto en el que le otorgaba este permiso fechado el pasado 29 de diciembre, cuando Majarenas terminaba otro permiso extraordinario y debía regresar a la casa de acogida Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos.
Apuñalaron a su hija
Majarenas y su hija fueron destinadas a ese lugar después de que el padre de la niña y expareja de la terrorista apuñalase a la menor cuasándole graves heridas. Dado que la pequeña ya había cumplido tres años, madre e hija no podían seguir juntas en un módulo de la prisión. Por ello se optó por llevarlas a la casa de acogida para que pudieran estar juntas.
Para ello, Majarenas firmó una carta en la que admitía el daño causado y manifestaba su "voluntad de desvinculación de ETA". No obstante los expertos acostumbrados a tratarla en prisión dudan mucho de que ese deseo de romper con la banda sea real. Majarenas, a la que tan sólo le quedan unos meses para terminar de cumplir su pena, disfruta de un régimen de semilibertad que le permite salir a diario de la casa de acogida para jugar con su hija al aire libre. Este último permiso para curarse de la tuberculosis ha contado con el visto bueno de la Fiscalía y cuenta con los informes médicos que acreditan la enfermedad.