La defensa de Francisco Correa, el cabecilla de Gürtel, ultima un acuerdo de conformidad con la Fiscalía para conseguir para su cliente la pena mínima a cambio de reparar el daño. Correa será juzgado en la Audiencia Nacional a partir del próximo lunes, 15 de enero, por la supuesta financiación ilegal del PP de Valencia, junto a otros 19 acusados.
En este juicio, Correa podría enfrentarse a una pena de 24 años y medio de cárcel de no alcanzarse el acuerdo. Esta pena se sumaría a la que ya está cumpliendo por el caso Fitur, de trece años, y a la que le espera cuando llegue la sentencia por la primera etapa de la trama Gürtel, por la que Anticorrupción pide 125 años.
La repatriación de fondos podría suponer la disminución de la pena para Correa
El Juzgado Central de lo Penal de la Audiencia Nacional aprobó el pasado mes de diciembre el desbloqueo de dos cuentas de Correa en Suiza para poder hacer frente con ellas al pago de la responsabilidad civil, según indicó el juez José María Vázquez Honrubia en un auto. El magistrado concretó que sólo se debía extraer de las cuentas los 2 millones de euros que la Fiscalía estima que defraudó con la financiación irregular de las elecciones autonómicas y municipales de 2007 y las generales de 2008.
El juez explicó en el auto que la repatriación de fondos “no sólo posibilita la pronta recuperación de la suma defraudada al perjudicado, sino que puede fundamentar la atenuante de reparación antes mencionada con la consiguiente disminución de la pena a imponer el acusado”.
Correa prometió cuando hizo uso de su derecho a la última palabra al final del juicio de Gürtel que quería “hacer un ofrecimiento a la Fiscalía, mi total colaboración absolutamente de ahora en adelante en todas las causas pendientes”.