Tras el insólito empate a 1515 del pasado día 27 de diciembre, la CUP sigue su debate sobre la posibilidad de investir a Artur Mas como presidente de Cataluña. Este sábado las asambleas territoriales del partido se reúnen para fijar una postura común de cara a la reunión del Consejo Político que la formación celebrará este domingo y que decidirá el fúturo político de Cataluña. Las reuniones han vuelto a reflejar la división interna.
La CUP lleva la investidura al límite, ya que si decide apoyar a Mas, el pleno del Parlament debería empezar el 4 de enero y votarse el 5
Los militantes cuperos reunidos este sábado, y el domingo los aproximadamente 70 integrantes del Consejo Político, se pronunciarán sobre dos propuestas alternativas y excluyentes: la primera implica rechazar la investidura de Mas emitiendo o bien 5 votos a favor y 5 en contra o bien con la abstención de los 10 diputados de la CUP. La segunda alternativa supone aprobar la investidura de Mas con 2 votos a favor y 8 abstenciones, lo que permitiría reflejar, "la apuesta de la CUP por la independencia y un proceso constituyente y popular" pero, también, "la oposición a la continuidad de las políticas de recortes y privatizaciones", según explicó esta semana la CUP.
En la de reunión de Barcelona, que ha tenido lugar en el Centro Cívico Pere Quart, el resultado, según fuentes de la CUP, sigue siendo rotundamente favorable al "no" -un 80 %- frente al "sí" -un 20 %-. En las asambleas territoriales del Penedès y Camp de Tarragona, la fórmula de facilitar la investidura, que se traduciría en que dos diputados voten a favor y los otro ocho se abstengan, ha contado sólo con un 40 % de los votos de los militantes y un 60 % en contra.
Por el contrario, en las asambleas territoriales del Maresme, Nord-Oriental (comarcas de Girona), y Alt Ter los apoyos al "sí" y al "no" han quedado repartidos al 50 % aunque la posición favorable a facilitar la investidura gana adeptos.
Las decisiones que se tomen en la docena de asambleas territoriales serán en todo caso orientativas de lo que pueda ocurrir en la reunión del Consejo Político, que aglutina a 68 dirigentes que forman el Secretariado Nacional de la formación y el Grupo de Acción Parlamentaria (GAP).
Las asambleas territoriales funcionan con el criterio de una persona, un voto y serán contabilizados tanto los votos a favor del acuerdo con Junts pel Sí (JxSí) como los contrarios y las abstenciones. A diferencia de asambleas anteriores, en las territoriales de este sábado sólo tendrán derecho a voz y voto los militantes de la CUP, por lo que han quedado excluidos tanto los simpatizantes como los representantes de las organizaciones externas a la CUP agrupadas en torno a la denominación de Crida Constituent.
Respecto al procedimiento que será utilizado por el Consejo Político, el secretariado indica que se votarán ambas propuestas por separado y, si ambas obtienen mayoría absoluta, se iniciará otra ronda de votaciones hasta que sólo sea aprobada una.
La CUP lleva la investidura al límite, ya que si finalmente decide apoyar a Mas, el pleno del Parlament debería empezar el lunes 4 de enero y votarse el martes 5 y, si es necesario, votarse de nuevo el jueves día 7.