El ministro de Consumo, Alberto Garzón, se ha refirmado en todo lo que dijo sobre las macrogranjas en la entrevista con el diario inglés The Guardian durante la conversación que ha mantenido este martes en el programa El Intermedio. "Lo que yo dije es absolutamente impecable", ha señalado el político, que también ha indicado que no se ha sentido desautorizado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El jefe del Ejecutivo aseguró en la radio este lunes que "lamentaba profundamente" la polémica que se había originado a raíz de las declaraciones de su ministro. Pese a estas palabras, el ministro no considera que Sánchez le haya desautorizado porque asegura que el Ministerio de Consumo está siguiendo las directrices de su Gobierno.
"La ganadería extensiva está amenazada por las macrogranjas. El lobby de las cárnicas han construido un bulo y a partir de ahí empezó la polémica sobre lo que no dije", ha explicado Garzón. "No puedo hacer nada si me construyen una mentira", ha aseverado.
Garzón también ha señalado que en muchas provincias de Castilla y León la gente se opone a las macrogranjas y ha criticado la postura del presidente de la comunidad, Alfonso Fernández Mañueco. "Ha negado que existan estas explotaciones. Ha entrado en el negacionismo, está negando un problema".
El ministro cree que la polémica es una estrategia de la extrema derecha. "Me preocupa que las derechas sigan gobernando en Castilla y León y que algún día lo hagan a nivel estatal. Trabajo para desvelar el proyecto de las derechas. Si me construyen un bulo y una mentira, eso es una problema para la democracia, pero eso no es achacable a mi persona", ha zanjado el ministro.
