Agentes de la Policía Nacional han desarrollado un dispositivo en Murcia en el que se ha detenido a seis personas a las que se les acusa de los presuntos delitos de tenencia, depósito y tráfico de explosivos así como otro de estragos. Un gran número de sus acciones con artefactos explosivos se produjeron contra torres eléctricas, depósitos de agua, edificios e infraestructuras y en ocasiones cerca de vías de comunicación y zonas residenciales.
Esta operación se materializa como consecuencia de una detención y la posterior entrada y registro, que se llevó a cabo en junio de este mismo año en la localidad de Molina de Segura (Murcia), en la que se arrestó a un joven de ideología anarquista por la elaboración y colocación de hasta nueve artefactos explosivos en polígonos industriales en desuso.
En esa ocasión, la Policía Nacional intervino 25 kilogramos de precursores con capacidad explosiva, concretamente nitrato amónico de grado explosivo, averiguando también que el detenido llevaba a cabo la confección de los artefactos así como la mezcla de los elementos, en un taller en su propio domicilio, según informaron fuentes de la Policía Nacional en un comunicado.
Las investigaciones han demostrado que estos individuos poseen conocimientos en el campo de la fabricación y manipulación de explosivos
En la segunda parte del operativo, culminada ahora, las pesquisas llevadas a cabo por los investigadores han permitido esclarecer la participación, en la preparación y colocación de artefactos explosivos, de seis personas de edades comprendidas entre los 21 y los 27 años, tanto en las pasadas nueve acciones por las que se produjo la operación del mes de junio como en otras 21 más, ejecutadas en la misma zona pero contra otros objetivos.
Intercambiaban consejos e instrucciones
El 'modus operandi' utilizado en la comisión de estos hechos ha sido siempre el mismo, usando como agentes explosivos pólvora negra y cloratita, siendo los contenedores utilizados bombonas de butano y extintores, que actuaban también como metralla.
Las investigaciones han demostrado que estos individuos poseen conocimientos en el campo de la fabricación y manipulación de explosivos, y así en sus comunicaciones intercambiaban consejos e instrucciones para la confección de los mismos.
Estas personas cometieron presuntamente sus acciones contra infraestructuras como depósitos de agua potable, torres eléctricas, edificios, naves y fabricas; produciéndose alguna de estas en las proximidades de la autovía A-30 y de zonas residenciales, suponiendo un grave riesgo para las personas y destrucción sobre las cosas.
La investigación se ha llevado a cabo bajo la supervisión del Juzgado de Instrucción número 2 de Molina de Segura (Murcia), que ha decretado el ingreso en prisión eludible bajo fianza para tres de ellos.
