La Guardia Civil y la Policía Nacional están llevando a cabo en las comunidades de Madrid y Castilla-La Mancha una macro operación contra el robo en viviendas, naves industriales y explotaciones agrarias, en la que se esperan más 50 detenidos y unos 40 registros.
Fuentes de la investigación han señalado que se trata de una organización criminal muy activa que se dedicaba a asaltar casas y naves, acusada de los delitos de robo con violencia y contra la propiedad.
A esta organización se le imputan de momento más de 100 delitos que han ocasionado unas pérdidas de tres millones de euros, aunque las fuerzas de seguridad creen que la banda podría haber participado en otros 300 asaltos, según las mismas fuentes.
Unos 600 agentes de ambos cuerpos están participando en esta operación contra una organización estructurada en cinco células que se repartían todas las noches su actividad delictiva en la Comunidad de Madrid y provincias de otras autonomías limítrofes.
De este modo podían estar actuando a la vez en Cuenca, Toledo, Valladolid o Ciudad Real, en un modus operandi que se repetía cuatro o cinco noches a la semana y en el que cada integrante de la organización tenía un rol perfectamente definido.
Objetivos
Viviendas habitadas, chalés de segunda residencia, naves de polígonos industriales, locales, parcelas y explotaciones agrarias eran los objetivos de esta organización.
Entre los registros que se están llevando a cabo figuran los practicados en las localidades madrileñas de Coslada (5), San Fernando de Henares (4), Torrejón de Ardoz, Valdemoro, Pinto y Parla (uno en cada caso), Madrid capital (4) y su distrito de Vicálvaro (2), además de uno en Valmojado (Toledo) y otro en Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real).
Cuatro empresas de recuperación de metales han sido registradas e inspeccionadas por los agentes del Seprona y el material incautado en ellas será trasladado a la cárcel de Herrera de la Mancha (Ciudad Real).