Oñate (Guipúzcoa): un niño se aproxima a un muñeco que representa a un agente de la Guardia Civil y simula dispararle con un rifle de juguete. La polémica está servida. Pero no se trata de un caso aislado. Con el verano recién estrenado, los acontecimientos que se viven en este municipio vasco suponen el habitual punto de partida de las campañas de acoso contra el Instituto Armado en esta comunidad autónoma y en Navarra.

La controversia de este año en Oñate ha tenido un elemento añadido. Y es que el protagonista de las imágenes era un menor de edad, que a tenor de las imágenes difundidas difícilmente puede llegar a los diez años. La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha pedido explicaciones al Ministerio del Interior y a Fernando Grande-Marlaska sobre las razones por las que la Delegación del Gobierno dio su beneplácito a este acto.

Lo cierto es que año tras año se celebra en Oñate la tradicional fiesta contra la Guardia Civil. La fecha varía, pero se busca el fin de semana más cercano al aniversario de los episodios que se produjeron en la Foz de Lumbier el 25 de junio de 1990.

Los terroristas Germán Rubenach, Susana Arregui y Juan María Lizarralde Urreta, integrantes del comando Nafarroa de ETA, acamparon en la zona para reunir información de las patrullas habituales de la Guardia Civil con el objetivo de perpetrar un atentado. Cuando estaban junto al río, se vieron sorprendidos por dos agentes, que estaban en la zona con motivo de los frecuentes robos a turistas.

En un tiroteo, los etarras mataron al guardia civil José Luis Hervás Mañas. Se desplegó un fuerte dispositivo en la zona de búsqueda de los terroristas, en una zona muy escarpada y de difícil acceso. Finalmente fueron localizados los cuerpos de Juan María Lizarralde y Susana Arregi. Germán Rubenach estaba malherido con un disparo en la cabeza. Salvó la vida y en sus primeras declaraciones afirmó que habían pactado un suicidio colectivo para evitar ser capturados por la Guardia Civil, pero su propio disparo no fue letal. Después cambió de versión y aseguró que fueron acribillados por los agentes del Instituto Armado.

Aunque las pruebas periciales y las declaraciones iniciales respaldan la primera versión, la izquierda abertzale se aferra al segundo relato. Susana Arregui nació en Oñate. Y con motivo del aniversario de su muerte siempre se celebra la jornada festiva, con participación infantil, en la que se honra la memoria de la etarra y se pide la expulsión de la Guardia Civil.

Campañas contra la Guardia Civil

Los acontecimientos que se viven en Oñate, no obstante, distan de ser algo excepcional. La celebración de las fiestas patronales en País Vasco y Navarra conlleva, en muchos casos, los actos reivindicativos en los que se exige la expulsión de las "fuerzas de ocupación"; principalmente, de la Guardia Civil.

Uno de los más conocidos tiene lugar en Etxarri-Aranatz (Navarra). De forma habitual, coincidiendo con sus fiestas locales, se celebra el llamado 'Día del Inútil', donde se arremete contra la Guardia Civil. En los actos, además, se desarrolla el 'Tiro al fatxa', donde los asistentes tiran objetos contra varias figuras, incluidas las de un agente del Instituto Armado.

Acontecimientos que suelen coincidir con actos en los que se ensalzan a miembros de ETA. De acuerdo a los datos recogidos por el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE), a través de su Observatorio de la Radicalización, en 2023 se registraron un total de 466 actos de apoyo a ETA.

Con todo, el número de actos de apoyo explícito a ETA y a sus terroristas en 2023 supuso una reducción del 21% con respecto a 2022, año en que registraron un total de 589 actos de apoyo a ETA. Covite destacó, además, la desaparición de los ‘ongi etorris’ a presos de ETA a su salida de prisión: "2023 ha sido el primer año en que no ha registrado ningún acto de este tipo desde que el Colectivo empezara a denunciarlos públicamente, a finales de 2016".

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