El Rey se encuentra este jueves con los representantes de las víctimas del terrorismo en una audiencia improvisada, que no estaba prevista en la agenda oficial. La Zarzuela ha convocado a la Fundación de Víctimas del Terrorismo, que agrupa a todo el colectivo, y en cuya representación acuden a la cita su presidenta, Maria del Mar Blanco, la vicepresidenta, Ángeles Pedraza, y el vicepresidente segundo, Tomás Caballero.
Pedraza y Blanco se reunieron la semana pasada con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, también en un encuentro improvisado en Moncloa y dos días después de la convocatoria de una concentración en Madrid para mostrar el rechazo de las víctimas a la resolución del Tribunal de Estrasburgo contra la doctrina Parot.
En esa movilización ciudadana celebrada en Madrid, a la que acudieron decenas de miles de asistentes, se escucharon voces contra el Gobierno, contra el Partido Popular (que se sumó a la inciativa y que envió a sus tres vicesecretarios generales) y contra determinadas actuaciones en política antiterrorista, en especial el tratamiento penitenciario dispensado a determiandos reclusos etarras, como Bolinaga.
Rajoy consiguió que al menos en las intervenciones públicas que se escucharon en Colón no se vertieran descalificaciones concretas hacia el Gobierno, lo que crispó a un cierto sector de los asistentes que consideraron muy tibios los mensajes de los oradores. Ese reproche ha provocado censuras y desencuentros entre representantes de las víctimas. A Consuelo Ordóñez, hermana de Gregorio Ordóñez, el concejal del PP asesinado por ETA, no se le permitio, por ejemplo, subir a la tribuna de oradores porque portba una pancarta muy poco amable con el PP y el PSOE.
Celeridad de la Audiencia
La celeridad casi obsequiosa con que la Audiencia Nacional dio curso a la resolución del Tribunal de Estrasburgo también ha sido motivo de reproche por parte de las víctimas que consideran que la puesta en libertad de la etarra Inés del Río, tan sólo unas horas después de conocerse el fallo del Tribunal europeo, resulta ofensivo hasta las lindes de la provocación. Del Río recurrió ante la sala de los Penal de la Audicencia Nacional la decisión de este tribunal de destinar una indemnización de 30.000 euros fijada por permanecer cinco años en prisión al pago de indemnizaciones a las víctimas. Se trata de otro duro golpe a los sentimientos de los cientos de familiares de asesinados por el terrorismo etarra, que se piensan desprotegidos tanto por el Gobierno como por le poder judicial.
Ayer, el ministro del Interior, Jorge Fernandez Díaz, anunció en el Congreso que en dos semanas el Gobierno tendrá preparada una propuesta para impedir que los etarras y otros condenados por graves delitos que sean excarcelados puedan recibir los subsidios previstos para quienes, tras cumplir sus condenas, no puedan ganase la vida. Ahora mismo existe un subsidio de 426 euros mensuales, que cobran durante un semestre estos ex-relusos. El ministro anunció esta iniciativa en respuesta a una demanda de Rosa Díez, líder de UPyD.
Este lunes, Dolores Cospedal, la secretaria general del PP, también encrespó los ánimos al arremeter contra quienes abuchearon e insultaron a algunos de los representantes de su partido que asistieron a la concentración, en especial a Iñaki Oyarzábal, dirigente del PP vasco. Otros, sin embargo, fueron jaleados y abrazados, como Esperanza Aguirre, Ana Botella, Ignacio González o Jaime Mayor Oreja.
La inciativa del Rey, quien sigue convalenciente de la intervención quirúrgica a la que fue sometido hace unas semanas, pretende actuar como bálsamo en el irritado colectivo, así como suavizar las relaciones con el Gobierno. La Casa Real siempre ha mostrado un cariño muy especial por las víctimas y en ocasiones precedentes ya ha mantenido reuniones con algunos de sus más destadados representantes. Sin embargo, esta es la primera vez que se encuentra con la Fundación desde que la preside Maria Mar Blanco, militante del Partido Popular y hermana de Miguel Ángel Blanco, uno de los símbolos más destacados del drama y el dolor provocado por los asesinos etarras. El Rey siempre dedica un pasaje en recuerdo de las víctimas en su mensaje de Navidad, que es el único no escrito por el Gobierno de cuantos pronuncia el Jefe del Estado.
Ángeles Pedraza, presidenta de la AVT, había transmitido la semana pasada a Mariano Rajoy su malestar por lo que considera una actuación poco comprometida del Gobierno en pro de la causa que ella representa y en particular por el episodio de Estrasburgo. "Se podía haber hecho mucho más", declaró Pedraza tras el encuentro con el presidente del Gobierno.