España

Dos días en el suelo con la cadera rota y la cara quemada de fumar: el calvario de una anciana que fue rescatada por la Policía

La Policía Nacional ha rescatado en Astorga (León) a una mujer que llevaba dos días tirada en el suelo de su domicilio porque tenía la cadera rota y no se podía mover

  • Coche de la Policía Nacional -

La débil voz de una mujer salía de una de las estancias de su domicilio en Astorga (León). Los agentes de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional localizaron a la víctima tirada en el suelo de su casa. Llevaba dos días sin poder moverse con las cadera rota y con la cara totalmente negra llena de ceniza por el tabaco. También había prendido fuego al dinero en efectivo que guardaba en su inmueble, según informan fuentes policiales a Vozpópuli.

El rescate de esta septuagenaria fue gracias a su vecina. Esta persona acudió a la Policía Nacional el pasado 12 de julio a las 21.15 horas para pedirles que se personaran en el número 5 de la calle Doctoral de Astorga. Llevaba dos días sin ver a esta mujer que no tiene ningún familiar en las localidades cercanas ya que todos sus seres queridos se encuentran residiendo en Barcelona.

Los policías estuvieron llamando en varias ocasiones a la puerta pero no obtuvieron respuesta del interior. Sin embargo, en un momento dado, llegaron a escuchar una débil voz que provenía de la casa pidiendo auxilio. Por esta circunstancia, los agentes con la ayuda de esta residente saltaron de balcón en balcón para entrar en la casa de la desaparecida.

Uno de estos policías comprobó que la puerta de cristal de acceso al interior de la vivienda estaba cerrada. Intentaron con el menor daño posible fracturar el cristal de la parte baja de la puerta para entrar al inmueble por la cocina.

Dinero quemado y tabaco por el suelo

Este fue el policía que localizó a la septuagenaria tendida en el suelo del comedor, en posición semilateral decúbito supino con la cara totalmente negra, al parecer de ceniza, al igual que las manos en estado consciente. La mujer se encontraba muy débil realizando manifestaciones incongruentes diciendo únicamente que tenía mucha hambre.

El funcionario abrió la puerta desde el interior ya que se encontraba la llave en la cerradura. El resto de compañeros pudo así entrar en la casa y llamaron al 091 solicitando la presencia de los servicios sanitarios.

Foto de archivo de un efectivo de la Policía Nacional.
Foto de archivo de un efectivo de la Policía Nacional.Europa Press

La casa de esta mujer se encontraba en buen estado, excepto el comedor en el cual se encuentra en el suelo decenas de cajetillas de tabaco de una conocida marca. Algunas de ellas estaban llenas y otras vacías, al igual que gran cantidad de cigarrillos extendidos por el suelo. La mujer, de nacionalidad española de 78 años, vivía en el inmueble de alquiler.

Los policías observaron un detalle extraño sobre uno de los sofás del comedor. Localizaron una bolsa hermética de plástico transparente en el que se podía ver una gran cantidad de dinero. Había más de mil euros en efectivo. Algunos de los billetes estaban quemados entre cenizas.

El Ayuntamiento realizaba gestiones para incapacitar a la mujer

Unos minutos después, a las 22:15 horas, se personaron en la zona los especialistas sanitarios que procedieron al traslado al centro de salud de esta localidad de Astorga. Manifestaron que probablemente esta mujer fuera trasladada posteriormente al Hospital de León por su estado.

También acudieron a la zona efectivos de Policía Local para colaborar con los agentes ya que señalaron que conocían bien a esta vecina y habían intervenido en varias ocasiones. Y es que el departamento de Asuntos Sociales del Ayuntamiento estaba realizando diversas gestiones con los Juzgados de Astorga con el fin de conseguir la incapacitación de la septuagenaria.

Después de toda esta intervención, los policías nacionales abandonaron el domicilio cerrando con las llaves tras de sí. El aviso de la vecina y el salto por el balcón de los funcionarios para acceder al inmueble fueron claves para ayudar a la septuagenaria. En el hospital se comprobó que había sufrido una caída y tenía la cadera rota, lo que le impidió moverse durante varios días.

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