El pasado 30 de octubre, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, pidió públicamente la posibilidad de contratar profesores nativos para colegios bilingües, puesto que la legislación actual no lo contempla. Fue un día después de la reunión que mantuvo el ministro de Educación, José Ignacio Wert, con los consejeros para debatir la reforma educativa.
El presidente madrileño pedía a Educación la posibilidad de "contratar a los mejores profesionales para desarrollar el programa de bilingüismo", que desde su inicio viene lidiando con problemas de personal: desde la escasez de profesores acreditados para cubrir todas las plazas hasta problemas para realizar suplencias por la falta de cualificación de los docentes.
Lo que Ignacio González no tuvo en cuenta al declarar que existen "algunas dificultades" en la contratación de profesores nativos es que la Comunidad de Madrid ya está contratando a profesores nativos para impartir clases bilingües a pesar de que la legislación, como él dijo, no lo contemple. Según fuentes de la Consejería de Educación madrileña, aproximadamente unos 25 profesores nativos están impartiendo clases a Secundaria en centros bilingües de la región.
Anuncios en prensa para trabajar en colegios públicos
Las fuentes consultadas por Vozpópuli explican que el proceso de selección de estos docentes se hizo por currículum y entrevista personal. "La Consejería buscaba apoyo bilingüe, tipo profesores visitantes, y lanzó una convocatoria publicada en periódicos del Reino Unido", declaran. Una vez seleccionados estos profesores, se les buscó plaza en la asignatura de Educación Física.
"No hay suficientes profesores habilitados como bilingües" para cubrir todas las plazas vacantes en los centros de Secundaria, aseguran estas fuentes, "pero con los que trajeron hubo profesores habilitados que en un principio se quedaron fuera".
Algunos de los profesores nativos fueron nombrados tutores, "lo que contraviene la normativa vigente". "Para ser tutor en Secundaria se exigen determinados requisitos de titulación y exámenes que no han acreditado", explican las fuentes.
Esta situación ha derivado en quejas a la Consejería por parte de los directores de algunos centros, ya que estos profesores "no entienden ni pueden hacerse entender" en los claustros de profesores ni en las reuniones con los padres, "ya que la mayoría de ellos no sabe una palabra de español". En el caso de los profesores nativos que han sido nombrados tutores de algún grupo, "la relación con los padres es igualmente inviable".