El nuevo Gobierno de coalición ha empezado con la entrega del Ministerio de Cultura y Deporte a Sumar mediante Ernest Urtasun. Esto es algo insólito, ya que en la anterior legislatura, los cuatro ministros que ocuparon la silla fueron de la cuerda del Pedro Sänchez: primero los independientes Máximo Huerta y José Guirao, después los socialistas José Manuel Rodríguez Uribes y Miquel Iceta.
Tampoco antes había ocupado la silla principal de Cultura un antitaurino declarado como Urtasun. Sus antecesores no siempre se habían mostrado favorables a la fiesta nacional, pero tampoco manifestaron su oposición a ella. De hecho, el anterior ministro de Cultura, Miquel Iceta, reconoció en una entrevista con Radiocable que no le gustan los toros pero que es "una manifestación cultural declarada". De ahí que votase en contra de su prohibición en Cataluña.
Esto hace que la posición del toro en España pueda quedar en tela de juicio, dado que por primera vez, un partido que ha propuesto eliminar cualquier tipo de apoyo a los toros ocupa el sillón de Cultura, precisamente la institución con competencias en materia de tauromaquia y actividades taurinas. Así lo manifestó la formación de Yolanda Díaz en su programa electoral para las elecciones del pasado 23-J.
El texto planteaba la "derogación de la Ley 18/2013 de protección cultural y patrimonial de la tauromaquia", además de suprimir "la financiación pública de los espectáculos taurinos con muerte del animal". A ello hay que sumar las declaraciones públicas que el propio Ernest Urtasun ha hecho a lo largo de su trayectoria: en 2016 afirmó que la tauromaquia es una actividad "injusta, sádica y despreciable", además de afirmar que "nunca puede considerarse cultura".
Pese a ello, en la Fundación Toro de Lidia, a través de su presidente, Victorino Martín, prefieren mantener la calma ante este nombramiento. "Hay que darle un margen de confianza", señala en declaraciones a Vozpópuli. Pide a Urtasun que como servidor público, ponga "el patrimonio nacional por encima de sus gustos personales" e indica a este diario que ya han solicitado una reunión para de cara a la legislatura que ahora da comienzo.
Desde la organización desean "que sea cierto que intente emular a Jorge Semprún", a quien Urtasun citó durante su toma de posesión: “En él está todo lo que conviene recordar: la cultura como antídoto contra la barbarie". El que fuera ministro de Cultura entre 1988 y 1991 con Felipe González era "un taurino declarado", tal y como recuerdan desde la Fundación Toro de Lidia.
Por su parte, el presidente de la Asociación El Toro de Madrid, Roberto García Yuste, señala que "la fiesta no es de ningún partido, es del pueblo". Por eso pide que a Urtasun, le gusten o no los toros, "los respete". Apunta que la llegada del nuevo ministro de Cultura le supone "incertidumbre y miedo", aunque prefiere "no cerrar la puerta a nadie, ya que no le conocemos". "Puede cambiar de opinión cuando nos conozca", señala, para después apuntar que lo importante es que la fiesta nacional "no se desproteja a nivel legal".
Queda entonces por ver si Ernest Urtasun proseguirá el camino que inició en Cataluña. Em 2010 formó parte del equipo que buscó la prohibición de los toros en la región, una propuesta que se llegó a aprobar hasta que el Tribunal Constitucional, en 2016, impidió que se llevase a cabo por invadir una competencia del Estado. Tras la negativa del TC, el ya ministro de Cultura firmó un manifiesto junto a los movimientos animalistas contra su decisión.
Urtasun, en caso de mostrar su oposición a la tauromaquia desde las instituciones, tendrá un reto difícil, ya que esta actividad, tras unos años de capa caída, goza ahora de una creciente popularidad: según publicó este diario, la tauromaquia mejoró en 2022 un 14% las cifras registradas en 2019, con récord de abonados en algunas ferias.
joluisma
No es de estrañar, su mamá se las traía con todos los que puediran "torear" a su padre. Pobre "chaval", conocerá su ADN
Madrid
No estoy de acuerdo. No manipulen que aburren ya. No habrá votantes de Vox que vuelvan al PP. Los Voxeros somos leales y viendo la incongruencia diaria de Feijoó sólo va a conseguir que muchos más voten a Abascal (lo leo en comentarios, en Twitter, en mi entorno); la gente ya no se acobarda y estamos todos MUY hartos, de encuentas, de politicuchos, de unos medios de comunicación que están perdiendo prestigio periodistico y credibilidad a velocidad de vertigo. Yo estoy esperanzada y expectante ante la "estrafalaria moción", según usted, que se llevará a cabo la semana que viene. Suerte Sr. Cacho. Elecciones ya! Fuera Sanchez y, si es posible, Feijoó también. España no está para cobardías y moderaciones. Mi voto, una vez más, a Vox.
Sevilla
Lo vas a tener muy crudo 'guapo'