España es el segundo país de la Unión Europea, por detrás de Portugal, con más pérdida de salario por el impacto de la pandemia en la economía, según el informe global sobre salarios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Esa pérdida se elevó al 12,7% entre el primer y segundo trimestre del año, aunque la principal razón no ha sido la supresión de puestos de trabajo, sino la reducción de las horas trabajadas.
El primer factor representa el 3% de la pérdida de ingresos para los trabajadores, mientras que al segundo corresponde el 9,7 %, según los datos que la OIT incluye en su informe.
"Como habíamos mostrado en informes anteriores, España es uno de los países donde hay más desigualdad salarial en el conjunto europeo. Con la covid, la realidad es que los subsidios que se dieron en España han ayudado mucho a que no hubiese un colapso del promedio de los salarios", dijo a Efe la autora principal del informe, Rosalía Vazquez-Alvarez.
Países más afectados
Los otros países más afectados -según un análisis que ha tenido en cuenta a la UE de Veintisiete más Noruega- han sido Irlanda, donde la pérdida de salario fue del 10,9 % y Francia, con -10 %.
Portugal, el país más perjudicado de todos, registró una pérdida de remuneraciones del 13,5%, según los datos proporcionados por las autoridades nacionales a la OIT.
Por género, la pérdida de salario fue más acentuada entre las mujeres en España (-14,9 %) que entre los hombres (-11,3%).
Vazquez-Alvarez explicó que el impacto de la pandemia ha sido mucho mayor en los salarios más bajos y ha provocado que la distancia que los separa de los mejores salarios haya crecido.
"Esto ha creado una brecha salarial incluso más grande de la que había antes, cuando era aproximadamente del 24 %, mientras que ahora es del 36 %, es decir ha habido un gran aumento", analizó la experta.
Incremento de salarios más alto de los últimos años
La crisis sanitaria ha golpeado a España después del primer año (2019) en el que se observaba el incremento de salarios más alto de los últimos seis a siete años, y que alcanzó el 1,2% en términos reales.
La OIT ha advertido en la presentación de su informe de que las consecuencias económicas de la pandemia durarán y ejercerán una "enorme presión" a la baja sobre los ingresos a nivel mundial.
En ese contexto, los salarios mínimos y los subsidios a los trabajadores son considerados las principales armas para evitar una crisis social todavía peor.
"Estimamos que los subsidios que se han dado a los trabajadores en muchos países han compensado hasta el 40 % de la pérdida total de salarios", dijo hoy el director general de la OIT, Guy Ryder.
"Debido a que estos subsidios benefician sobre todo a los trabajadores con menores ingresos, es probable también que estas políticas ayuden a contener la tendencia a un aumento de la desigualdad", agregó.
Los datos confirman que la pandemia provocó que los salarios se redujeran o crecieran más lentamente en dos de cada tres países del mundo en lo que va del año.