El 60% de los españoles afirma que “intenta no tirar nada, excepto cuando es inevitable”, mientras que un 31% aprovecha lo que está menos malo; mientras ue sólo un 9% tira los alimentos “cuando se pone mala”, según una encuesta de Unilever a través de Ipsos Digital.
Unilever difundió los resultados coindiendo con la celebración, el 29 de septiembre, del Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio Alimentario,
La fecha, creada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), recuerda que “es necesario evitar la paradoja del hambre en un contexto de pérdida y desperdicio alimentario”, y para ello es urgente un cambio de paradigma para modificar los hábitos de consumo y lascostumbres y contribuir así restaurar y reestablecer sistemas alimentarios más justos.
Unilever señaló que, por ello, ha querido “tomar partido y conocer el grado de concienciación y para ello se han analizado los hábitos de reaprovechamiento de los hogares españoles, así como las medidas y acciones que se llevan a cabo para evitar el desperdicio como la planificación de la compra o el conocimiento de recetas de reaprovechamiento”.
Encuesta
La encuesta, realizada a través de la plataforma Ipsos Digital a partir de una muestra de 750 personas con edades comprendidas entre los 18 y los 65 años, pone de manifiesto que son cada vez más los hogares que han asumido esta responsabilidad:
La cocina de aprovechamiento, es decir, la posibilidad de reutilizar las sobras para realizar nuevos platos es, sin duda, el principal antídoto para evitar el desperdicio en las cocinas. Al respecto, el 56% de los consultados afirma conocer recetas de aprovechamiento; un 26% señala que las conoce, pero que no las pone en práctica y cerca del 20% no sabe de qué se trata.
La planificación de las compras es otra de las principales prácticas que contribuyen a un consumo responsable en los hogares y en este campo, hasta un 96% de los encuestados sostiene que siempre intenta preparar sus compras con antelación.
En este sentido, la encuesta también analiza el proceso de decisión de compra del consumidor y ha querido conocer qué peso tienen las ofertas en su cesta de la compra: el 56% aprovecha los descuentos, aunque sean de productos que no estaban planificados o no necesita, mientras que un 44% destaca que no se deja llevar por las ofertas.
El consumidor también conoce las diferencias entre la fecha de caducidad y la fecha de consumo preferencia tal y como sostienen los datos de la encuesta: un 92% frente al 8%.
La planificación de comidas, no sólo de las compras, es otra de las prácticas necesarias para evitar el desperdicio y hasta un 72% afirma que planifica un menú semanal y que organiza comidas y cenas para llevar un mejor control de los alimentos frente a un 28% que “cocina comidas y cenas sin ninguna planificación”.
Formación para evitar el desperdicio
El estudio también analiza si es necesario una mayor formación para evitar el desperdicio; para reutilizar y para sacarle el mayor partido a cada ingrediente y en este sentido, los datos son contundentes: el 85% considera que sería útil tener más información al respecto para evitar el desperdicio.
Según Ana Palencia, responsable de Comunicación y de Sostenibilidad en Unilever, “el mayor impacto y responsabilidad de Unilever radica en nuestra capacidad para influir en nuestros proveedores y clientes para que sigan nuestro ejemplo y, en particular, en los consumidores, para que desperdicien menos alimentos y por ello, contar con información actualizada como la que se desprende de este trabajo nos ayuda a crear una mayor conciencia necesaria para la toma de acción”.
Unilever lanzó en el año 2013 la primera Guía práctica para evitar la pérdida de alimentos, a través de una serie de consejos, trucos e ideas. Asimismo, la compañía ha impulsado recientemente un itinerario educativo online para las escuelas de la mano de Ambientech con el objetivo de concienciar a adolescentes españoles sobre la importancia de minimizar la cantidad de comida que diariamente acaba en la basura.
También a través de la marca Hellmann's, Unilever lidera un movimiento de consumidores contra el desperdicio alimentario; y la compañía cuenta con numerosos programas de cero residuos en vertederos.