Esperanza Aguirre sigue activa políticamente. Aunque ya no es presidenta de la Comunidad de Madrid, sigue al frente del PP madrileño e imparte doctrina en ciertas ocasiones. Como en una tribuna publicada este martes en el diario ABC titulada "Un castigo para quienes no son claros". En este artículo, Aguirre tiene como principal argumento que "los electores han premiado a los partidos que han hablado claro y han castigado a los que han enviado un mensaje incomprensible, falso o confuso".
En el caso de Esquerra, han premiado "que haya hablado sin ambages de la ruptura con España y de la implantación en Cataluña de un Estado absolutamente intervencionista", lo que para Aguirre es "un proyecto aberrante, pero claro de entender y coherente con la tradición del partido". Igual habría pasado con Ciutadans, "que ofrecía una Cataluña próspera dentro de España, parte esencial de España, como vía para estar en Europa". Respecto al PP, también se le ha premiado, según la política conservadora, "por defender la Constitución Española en Cataluña que, no se olvide, fue votada por el 91 por ciento de los catalanes hace solo 34 años".
Por otra parte, los catalanes castigaron a CiU, según Aguirre, "porque no han entendido su giro de los últimos tiempos", ya que su marca estaba asociada con"" moderación, posibilismo, catalanismo sensato. Sin embargo, tras la Diada CiU se convirtió en un "apéndice de Esquerra", algo que sus votantes no entendieron. Por otra parte, el PSC -que Aguirre rechaza definir como "socialdemócrata"- ha sido castigado según la expresidenta porque los catalanes "tenían identificado al Partido Socialista como un partido de izquierda moderada e inequívocamente español y constitucionalista", algo que dejó de ocurrir tras el tripartito.
Por último, a Aguirre le alarma la aparición de partidos "antisistema", tales como CUP, que consiguió 3 escaños, "y eso que los votantes que todavía querían votar comunista teníana a Iniciativa, y los que querían votar independencia tenían a Esquerra". Por tanto, asegura, "los electores prefieren a los partidos que hablan claro".