La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha insistido en una entrevista radiofónica en Onda Cero en que ella es "gran parte responsable" por la trama de corrupción descubierta por la Operación Púnica, pero se ha defendido argumentado que no conocía a todos los ediles populares detenidos, ya que ha "nombrado a muchas personas durante los últimos 30 años". La antigua presidenta madrileña ha abogado por que los partidos mayoritarios, el ya famoso bipartidismo, lleguen a un acuerdo "para cambiar la ley electoral y el sistema de adjudicación de contratos" e impedir así en el futuro que se repitan casos como estos.
La que fuera jefa del Ejecutivo regional admitió que en Francisco Granados, detenido por su implicación en la trama de corrupción municipal, "no daba signos" de estar metido en actividades ilícitas. "Es verdad que yo perdí la confianza en él", explicó, pero "por razones políticas". “A Granados sí lo he puesto yo, y parece ser el jefe de todo esto”, ha recordado.
Aguirre ha vuelto a defender la controvertida elección directa de alcaldes, incluida en la reforma electoral que planea llevar a cabo el Gobierno, ya que hace "que de verdad los ciudadanos conozcan a la persona que eligen". Ha dicho que esa modificación sería, entre otras medidas, un "remedio eficaz contra la corrupción”. Preguntada sobre si PP y PSOE tienen aún tiempo de reacción para contrarrestar el auge de Podemos, la dirigente popular ha sido clara: “Se lo estamos dando todo hecho [...] Tenemos que reaccionar muy en serio", ha manifestado, declarándose "abochornada”.
No "abandona el barco"
Sobre su posible vuelta a la primera línea política como candidata del PP a la alcaldía de Madrid, Aguirre ha confesado que ella tiene "ideas que pueden hacer que la regeneración llegue". "No creo que deba abandonar el barco mientras esto se hunde", ha añadido en alusión a una eventual candidatura. La presidenta del PP madrileño ha defendido que "hay que dotar de mayor democracia interna a los partidos, para que los militantes elijan en los partidos. Lo que digan los militantes es lo que tiene que ser".
Por último, preguntada sobre una posible limpieza del partido en Madrid por parte de Génova a propósito del escándalo de la Operación Púnica, Aguirre ha manifestado que “no estamos libres de corrupción en ningún ámbito de la vida". "Aquí lo que pasa es que llueve sobre mojado. Los casos están aflorando y yo me alegro un montón de que afloren". Y aboga por que a los involucrados "se les juzgue, se les condene y devuelvan lo que han robado”. Y ha aporvechado para lamentar el retraso en la instrucción judicial de causas por corrupción. "Hay que poner un plazo a los procedimientos de corrupción. Máximo un año. Porque lo contrario es lo que hace que los ciudadanos piensen que los políticos son impunes”. “Si los señores del Gurtel, que llevan seis años en sus casas, hubiesen estado en la cárcel…", ha dicho Aguirre sin concluir su reflexión.
