El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, ha afirmado que la renuncia definitiva de ETA a la violencia debe dar paso a "una paz duradera" y ha destacado que, "abonando la memoria con el recuerdo de las víctimas, florecerá una nueva Euskadi sin sed de venganza, con respeto y libertad".
En una comparecencia ante los medios de comunicación celebrada en la sede de Sabin Etxea de Bilbao, Urkullu ha calificado de "momento emocional y trascendente" la declaración de cese definitivo de la actividad armada de ETA.
En este día, ha querido recordar a quienes "estos años han pagado el duro tributo de la intolerancia violenta" y ha afirmado que "su sacrificio no será estéril, porque abonando nuestra memoria con el recuerdo de las víctimas, florecerá una nueva Euskadi sin sed de venganza, con respeto y libertad".
A su juicio, "por fin se va a poder pasar página" porque "el bien supremo de la paz está a la vuelta de la esquina". "Euskadi ha doblegado a la violencia", ha dicho, para apuntar que "la renuncia definitiva al ejercicio de la violencia tiene que dar paso a una paz duradera en Euskadi".
Urkullu ha ofrecido la mano del PNV a la izquierda abertzale, para que, con el conjunto de partidos vascos, recorran "unidos ese camino de reconciliación y concordia". "El tiempo de ETA, 'Euskadi Ta Askatasuna' ha terminado, comienza el nuevo tiempo de 'Askatasuna ta Euskadi', el tiempo de la Libertad y Euskadi. Gora Euskadi Askatuta (Viva Euskadi libre).